La dimensión sociológica de Biodanza se basa en un profundo sentimiento de fraternidad, no en una ideología humanista. Es la activación de los núcleos innatos de vinculación lo que permite una transformación social profunda. Los cambios sociales basados en la lucha política son externos y no incluyen a las personas, como lo demuestran los regímenes totalitarios que simplemente reemplazan una clase dirigente por otra.

Los etólogos y sociólogos clásicos han hablado de un “instinto gregario”, un factor instintivo de cohesión entre los individuos de una especie, vinculado a la supervivencia. Von Uexküll propuso que la especie es el organismo y el individuo es el órgano, destacando la profundidad de los lazos biológicos entre los miembros de una especie. Hoy sabemos que esta vinculación trasciende la especie y nos conecta con todo el universo.

Estas consideraciones etológicas, biológicas y antropológicas confirman que la vinculación interhumana es una función biocósmica. El ser humano, en su desarrollo histórico-cultural, experimenta una deformación violenta de estos impulsos de afinidad natural. Nuestra cultura, a través de sus medios de comunicación e instituciones, fomenta actitudes de segregación, rechazo, agresión y explotación.

La cultura está estructurada sobre un esquema de poder, caracterizado por lo que el etólogo Michael R. A. Chance llama “sociedad agonística”, basada en la tensión y el miedo provocados por la emergencia del macho más fuerte. En contraste, la “sociedad hedónica” reduce la tensión entre individuos mediante el contacto físico. Si extrapolamos estas categorías al plano humano, podríamos comparar los gobiernos totalitarios con la sociedad agonística y encontrar una hipótesis evolucionista para explicar la violencia actual.

El problema social radica en transformar nuestro esquema de vida agonístico en uno hedónico, introduciendo el contacto y la caricia para disminuir la tensión interhumana. Esta transformación no puede ser solo ideológica; debe activar los núcleos innatos, biológicos, instintivos y emocionales del contacto corporal.

Desde la perspectiva de Biodanza, la transformación social implica la activación hipotalámica de vivencias de contacto y afectividad, y la demolición de tabúes sexuales, políticos, religiosos y psiquiátricos. La demolición de los tabúes sexuales comenzó con Freud y se expandió con pensadores como Wilhelm Reich, Aldous Huxley, Bertrand Russell, Herbert Marcuse, Michel Foucault, Ronald Laing, Carl Rogers, y escritores como D. H. Lawrence, Henry Miller, Allen Ginsberg, Violette Leduc y Jean Genet.

El desencanto con los ideales de cambio social a través de la política es creciente. Pocas personas informadas aceptan actualmente las consignas del totalitarismo o las democracias burguesas. La revolución fascista mostró su cara en los hornos crematorios de Hitler, y el totalitarismo en la burocracia asesina de Stalin. Las democracias han mostrado su cara en Vietnam y en la explotación de países dependientes.

Nuestra propuesta es empezar de nuevo, activando nuestros potenciales innatos de vinculación, curando nuestra propia malignidad y aprendiendo de la historia.

La Acción Social en Biodanza es una forma de rehabilitación existencial que abarca el estilo de vida, los trastornos motores y mentales, y las formas de vinculación interhumana. Juan José López Ibor señaló la correlación entre los “estilos de vivir” y los “estilos de enfermar”, sugiriendo que nuestro modo de vida puede predecir nuestras patologías.

Desde el punto de vista psicológico, Biodanza reduce la ansiedad y el estrés mediante ejercicios que favorecen la autorregulación orgánica. Arthur Jores, en su catálogo de patología general, identificó enfermedades “exclusivamente humanas” como el precio de nuestro modo alienado de vivir, denominándolas “enfermedades de civilización”.

La acción terapéutica de Biodanza implica la conciencia de que nuestro estilo de vida puede conducir a patologías específicas, y puede ser considerada un sistema de reeducación afectiva para “enfermos de civilización”. Ludwig Binswanger, creador del Psicoanálisis Existencial, afirmó que el individuo desvinculado está gravemente enfermo, y que toda su existencia es un padecer si no puede conectarse con la naturaleza, su prójimo y consigo mismo.

Karl Jaspers describió con hondura filosófica las formas de comunicación existencial, la “existencia autentica” y la “existencia frustrada”.

La Acción Social consiste en modificar la estructura misma de la cultura vigente, sus valores: la actitud elitista, lo competitivo, la falsa idea de triunfo, la discriminación social y, en gran medida, las metodologías educativas que tienden a mantener la patología cultural.

Nuestro gran desafío es emprender una Acción Social sin involucrarnos en ideologías políticas.

La Acción Social de Biodanza se basa en el movimiento-amor y no en una ideología.

Análisis de la Patología de Nuestra Civilización

Por primera vez en la historia, los hombres tienen conciencia de vivir dentro de una cultura enferma.

La antropología médica sostiene que las enfermedades del individuo no son, sino la expresión de una profunda enfermedad social.  Holliday desarrolla la tesis de una medicina para la sociedad enferma y  Arthur Jores, en “La Crisis de la Medicina Actual” plantea la existencia de “enfermedades de civilización”.

Representa una tarea por realizar, el estudio etiológico de las enfermedades de la civilización occidental.

¿Qué habría sucedido si en lugar de desarrollar la línea de Parménides, el Occidente hubiera seguido la línea de Heráclito?

¿Cuál sería el destino de la Psicología actual, si los pensadores en lugar de desarrollar la línea conductista de Wundt y el pensamiento psicoanalítico de Freud, hubieran seguido los desarrollos de Dilthey poniendo su centro de atención en la vivencia, o hubiesen orientado su evolución a partir del pensamiento de integración de Von Bergman?

Son preguntas que nos hacen pensar en el fuerte determinismo histórico que permite la estabilización de ciertas líneas culturales y de ciertos valores, a expensas de importantes “pensamientos – fuerzas” que se extinguen frente a la arrolladora inercia cultural.

He intentado diseñar una hipótesis sobre los factores etiológicos de la patología histórica de la cultura occidental.

Cuatro Vertientes Culturales

Nuestra cultura se ha nutrido de 4 grandes vertientes, que han aportado sus valores, sus glorias y equivocaciones:

La vertiente Oriental: aporta los valores anti-vida: “La vida es una ilusión y sus formas no son sino los infinitos velos de Maya.  (…)  Los deseos y emociones son la fuente de todo sufrimiento y hay que amortecer las sensaciones corporales.”
Este pensamiento niega el valor divino de la vida real y está ciego para percibir el sentido cósmico y creador de la existencia.

La vertiente Judeocristiana*: logró producir, durante siglos, la castración,  la violencia del Antiguo Testamento, la intolerancia de esta línea cultural frente a la posibilidad de placer y del goce, logró desenvolver magnos programas de frustración humana.
Podríamos simbolizar esta rigidez en la figura de Abraham.  La amenaza de un Dios terrible, se cernía sobre los pueblos que pudieran desplegar la belleza del instinto.  La carga de culpabilidad fue transmitida a través de los siglos.

La vertiente Griega: con la separación cuerpo – alma, contribuyó a reforzar la catástrofe antropológica, desencadenada por las dos anteriores líneas culturales. La aparición del idealismo platónico generó su opuesto: el materialismo.  La disociación entre el espíritu y la materia, adquirió forma operatoria.  La prioridad del mundo de las ideas, llegó a su expresión paradigmática en el “Cogito, ergo sum”, de Descartes.

La vertiente Romana: La aparición del poder absoluto y la separación entre señores y esclavos, culminó en el Estado Romano. Julio Cesar es el símbolo de la visión imperialista y avasalladora que, a través de los siglos, culminaría en el nazismo de Hitler.  Por supuesto, el modelo de imperio de origen divino se dio, con siglos de anterioridad, en Oriente; pero fue en el Foro Romano donde se estructuró el “Derecho” que hasta nuestros días se enseña en las escuelas de jurisprudencia.

La extraordinaria estabilidad de la patología de la cultura, se explica porque cada uno de los sistemas señalados, se retroalimentan unos a otros.  Un análisis filosófico de la historia demuestra que la línea oriental no sólo niega el valor de la vida como proceso de creación actual que encuentra su sentido en sí misma, sino que participa también de las patologías de las otras tres vertientes culturales:

  • Represión sexual,
  • División cuerpo – alma,
  • Omnipotencia y discriminación humana.

La represión de los impulsos, de la línea judeocristiana, a semejanza de la concepción oriental, propone la renuncia al “placer terrenal”. El Karma hindú tiene, filosóficamente, una equivalencia al cielo e infierno judeocristiano.  Para ambas concepciones, la vida es un pasaje hacia una existencia futura, y cuerpo y alma están separados. Ambas vertientes han estado siempre guiadas por una concepción totalitaria y al servicio de las clases dominantes. La represión de la sexualidad mantiene el control de los pueblos y acrecienta el poder de la clase dominante. Los regímenes totalitarios fomentan la disociación afectivo – práctica, mediante lavados de cerebro colectivos.

Se produce, así, una ultra-estabilidad de los valores culturales recíprocamente retroalimentados: un “1homeostato cultural” que integra a las instituciones y las pone al servicio de la conservación de la patología histórica.

1Homeostato:  mecanismo de retroalimentación, que permite alcanzar y mantener un estado de equilibrio.

Aquí van las reflexiones personales de Rolando Toro sobre los valores Anti-vida aportados por las Cuatro Vertientes Culturales

1 Oriental

Aportó mucha sabiduría, arte.  Entre todo su bagaje de valores, está la afirmación de Buda:  “la vida es una ilusión generada por los infinitos velos de Maya. A través de miles de Karmas irá alcanzándose la perfección.”

Rechazo esta afirmación.  El valor sagrado de la vida tiene sentido en la vida misma.

Rechazo la filosofía de amortecer los sentidos y los deseos, de no buscar el placer; rechazo la afirmación de que las emociones son la fuente de todo sufrimiento.

Bajo la influencia de estas ideas, las personas han cambiado su percepción de temporalidad:  ya no les importa vivir ahora, sino que esperan hacerlo en un futuro karma, reencarnación o paraíso.

Mi percepción y conciencia me revelan que la vida es aquí – ahora, no un instrumento para alcanzar otra vida. Valorizo la vida con su valor intrínseco, con su don divino.

 

2 Judeocristiana

De esta vertiente, proviene la castración de la humanidad, la represión sexual; la tiranía sobre la sexualidad de las personas, de un dios terrible que castiga a los que se entregan a los placeres de la sexualidad.

La figura de Abraham tiene una patología tan evidente que, por satisfacer la divinidad castradora, era capaz de sacrificar a su hijo.

Los castigos del infierno están cuidadosamente descritos.

Machismo y feminismo provienen de esta ideología religiosa.

 

3 Cultura Griega

Da origen a la más grande catástrofe antropológica, que cristaliza con Platón, la separación cuerpo – alma, que genera el idealismo platónico y su contrapartida, el materialismo.  La separación cuerpo – alma genera, como consecuencia, la enfermedad psicosomática; genera la hipocresía.

Los seres humanos somos una totalidad. El idealismo niega a las personas sus deseos, sus emociones, su animalidad.

 

4 Cultura Romana

La idea que puede existir el jefe, de origen divino, y esclavos, y que se pueden dominar los pueblos y crear grandes imperios, proviene de Roma. Adquirió el imperialismo una legislación que, desde hace 2000 años, es estudiada por los abogados.  Es la base de las leyes:  leyes del imperialismo, del poder. Leyes de Cesar, Calígula y Nerón.

¿Cómo es posible que se haya conservado esta miasma?, ¿Cómo es posible que se haya mantenido esta patología?

Ha podido mantenerse porque existe un mecanismo homeostático de la cultura, en que una patología se retroalimenta con la otra.

Los pensadores de la India, estuvieron siempre de parte del poder, de los maharajás.  La religión judeocristiana estuvo siempre al servicio de los reyes, de los poderosos; nunca de parte del pueblo. Portugueses, españoles, franceses, ingleses, han tomado este modelo y lo han reformulado, adaptándolo a las propias exigencias.

Esquemas Comparativos entre la Cultura Occidental y una Nueva Civilización

 

Cultura Occidental

 

La vida es una ilusión.  Infinitos velos de Maya.
Patología: desvalorización esencial de la vida (cultura anti – vida)

El sexo es pecado.  Abraham.
Patología: represión sexual (cultura anti – amor)

Poder absoluto, imperialismo.  Cesar.
Patología: injusticia social y discriminación (cultura de la explotación)

Separación cuerpo – alma.  Platón.
Patología; disociación cuerpo – alma (cultura idealista o materialista)

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Nueva Civilización

 

A – La vida es aquí – ahora, posee una valor intrínseco.  La existencia tiene la cualidad de realidad esencial.  La vida es la expresión máxima del sentido del Universo (Albert Schweitzer).

B – Cuerpo y alma, materia y energía, son dos aspectos de una sola realidad.  El ser humano es una unidad integrada al cosmos.  Unidad del hombre, de la vida y del universo son correlativas (Albert Einstein, Teilhard de Chardin).

C – La sexualidad es un impulso natural y saludable, al que todos deben tener acceso. Su objetivo inmediato es el placer y el encanto de la voluptuosidad.  El sexo permite el flujo genético de la vida.  Cada persona tiene derecho a expresar sus propios padrones de respuesta sexual, sean hétero, homo o bisexuales (Wilhelm Reich, D. H. Lawrence, Bertrand Russell, Oscar Wilde, Carl Rogers, Master y Johnson). Mi Opinión personal: Ese derecho personal, no le otorga lugar al estado a la participación.

D – El amor comunitario es el fundamento de la conciencia comunitaria. Justicia y libertad en gobiernos democráticos, sin explotación (Roger Garaudy, Paulo Freire, Mariscal Tito, Salvador Allende).

La estrategia de Biodanza

Consiste en individualizar los pensadores orientados hacia una visión integradora del hombre y hacia el respeto por la vida.

  • Como contrapartida de Abraham, Calígula, Buda, Platón, encontramos entre otros a: Albert Schweitzer y Teresa de Calcuta, quienes han sostenido la reverencia por la vida.
  • Sigmund Freud y Wilhelm Reich han denunciado que, la patología cultural, produce neurosis. Reich fue expulsado de la Asociación Psicoanalítica y del partido comunista.
  • Charles Darwin reconoció nuestra conexión con el animal. Darwin fue considerado el “hazme reír” de su época.
  • Roger Garaudy propuso “danzar la vida”.
    .

Cultura Escindida y Cultura Biocéntrica

Nuestra cultura está escindida por una profunda disociación que infiltra todos los ámbitos del saber. Esta disociación, se proyecta patológicamente en la educación, en la psicoterapia, en la medicina, en la sociología y, en general, en las ciencias del hombre.

Diríamos que la cultura realiza un vasto proceso de traición a la vida, en el que participan, consciente o inconscientemente, millares de intelectuales, que separan las nociones de cuerpo y alma, hombre y naturaleza, materia y energía, individuo y sociedad, sagrado y profano.

La disociación entre lo sagrado y profano, que es inherente a las religiones, tiene que ser cuestionada.  Si la vida en sí misma es sagrada, por ser la más espléndida expresión de lo cósmico y es también la más amplia ierofania, la distinción ritual de ámbitos sagrados y profanos resulta absurdo.

La claridad del Principio Biocéntrico de Biodanza, que reconoce en la vida la más grande hierofanía, es lo que distingue esencialmente Biodanza de cualquier religión y también de cualquier psicoterapia.

En Biodanza, las personas, al relacionarse en una Danza de Amor, restablecen un sentido cósmico que las integra a una unidad mayor.  Los magnetismos de la danza, generan campos creativos, eróticos y biológicos que no pretenden representar una realidad trascendente, sino que constituyen, en sí mismos, la gran ceremonia de la vida, trascendente por sí sola.

La cultura escindida descalifica la vida presente, la desacraliza y sabotea su valor intrínseco, para ponerla al servicio de valores anti-vida.

La Educación está infiltrada por la cultura escindida.  No obstante, la evolución de la ciencia y del pensamiento complejo, se orientan actualmente hacia una integración de conceptos que permanecieron separados durante muchos siglos y que dieron origen a la civilización anti-vida.

Biodanza propone la Integración Biocéntrica de la cultura y su ejercicio operacional en educación.

Presento aquí, dos figuras que ilustran, en el primer esquema la disociación cultural y, en el segundo esquema, la Integración Biocéntrica de la cultura.

Convergencias e Implicaciones entre Bateson y la Cultura Biocéntrica de Toro

La obra de Bateson proporciona un marco epistemológico que puede enriquecer la comprensión y la práctica de la cultura biocéntrica de Toro. Ambos enfoques sugieren una transformación profunda en la forma en que entendemos y nos relacionamos con el mundo, promoviendo una mayor armonía y respeto por la vida en todas sus formas.

Bibliografía especifica de quienes contribuyeron a la Cultura Biocéntrica

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  • A Torto e a Ragione – Intercritica tra Scienza e Mito Editoria Hopeful Monster, 1989 – Firenze, Italia
  • Entre o Cristal e a Fumaça – Ensaio sobre a Organizaçâo do Ser Vivo Editora Joger Zahar, 1992 – Río de Janeiro, Brasil

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  • La Totalidad y el Orden Implicado Editora Kairós, 1988 – Barcelona, España

Bunyard P., E. Goldsmith

  • L’Ipotesi Gaia Red Edizioni – 1ª Edizione 1992

Capra Fritjof

  • La Rete della Vita – Una nuova visione della natura e della scienza R.C.S. Libri e Grandi Opere S.p.A, 1997, Milano
  • O Ponto de Mutaçâo Editora Cultrix, 1982 – Sâo Paulo, Brasil

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  • Pertenecer al Universo – La Nueva Ciencia al Encuentro de la Sabiduría Talleres Gráficos Segunda Edición, 1993 – Buenos Aires, Argentina

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  • El Fenómeno Humano Editions du Seuil – Paris – 1995
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  • La Vision du Passé Trabajo escrito en 1942

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  • A Mente de Deus – A Ciência e a Busca do Sentido Ultimo Ed. Ediouro S.A. Río de Janeiro – Brasil – 1994
  • Il Cosmo Intelligente – Le Nuove Scoperte sulla Natura e L’Ordine Dell’Universo. Ed. Arnoldo Mondadori Editore – Milano – 1989

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  • Como Vejo o Mundo Editora Nova Fronteira, 1981, Río de Janeiro, Brasil
  • Einstein, la gioia del pensiero Françiose Balibar Ed. Universale Electa/Gallimard Scienza e Natura
  • Einstein i fondamenti della Relatività Newton Compton Editori, Novembre 1984, Roma, Italia

Einstein, Heisenberg, Schrödinger, Jeans, Planck, Pauli, Eddington

  • Cuestiones Cuánticas (Escritos místicos de los físicos más famosos del mundo)  – Editado por Ken Wilber. Editorial Kairós – Barcelona – 1986

Foerster Heinz von

  • Notas para uma Epistemología dos Objetos Vivos – A Unidade do Homem Vol. II Centro Royaumont para uma Ciencia do Homem Editora Cultrix. Ed. Universidad de Sâo Paulo, 1974
  • Sistemi che Osservano Casa Editrice Astrolabio, 1987 – Ubaldini Editore, Roma

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  • El Quark y el Jaguar, Aventuras en lo Simple y lo Complejo Ed.  Matetemas, 1996 – Barcelona

Gesell Arnold

  • L’embryologie du Comportement PVF, 1953 – Paris, Francia

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  • Insight Outlook Ed. Humanics New Age, 1989 – Atlanta, Giorgia
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Hofmann, Albert– Intervistato da Pino Corrias

  • Viaggi Acidi Stampa Alternativa – Millelire, 1992 – Stampato Presso Il CSF, Via Gesú, 62 – Roma, Italia.

Hofmann Albert, Richard Evans Schultes

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  • Il Pensiero Ecologico Editora Hopeful Monster, 1988 – Firenze, Italia
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  • Terra-Patria Scienza e Idee, Collana Diretta da Giulio Giorello.  Editora Raffaello Cortina. 1994 – Milano, Italia

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  • El Yo y su Cerebro Ed. Labor Universitaria, Monografías – Barcelona – 1980

Prigogine, Ilya

  • Dall’Essere al Divenire Editora Giulio Einaudi, 1986 – Torino, Italia
  • ¿Tan Sólo una Ilusión? – Una Exploración del Caos al Orden Editora Tusquets, S.A., 1988 – 2ª Edición – Barcelona, España
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  • Principles of Biológical Autonomy Editora Elsivier North Holland, 1979 – Nueva York
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Wilber Ken, Karl H. Pribram, Fritjof Capra, Marilyn Ferguson, Kenneth R. Pelletier, Renée Weber, Stanley Krippner, Itzhak Bentov e outros

  • O Paradigma Holográficos – e outros paradoxos Editora Cultrix – Sao Paulo, Brasil

Diseño del Apocalipsis

La atmósfera apocalíptica impregna nuestra vida diaria. El Apocalipsis no es una posibilidad futura, sino una forma interna de experimentar la existencia. No se trata solo de la destrucción ecológica, la extinción de la fauna, la violencia institucionalizada, el genocidio, la barbarie, el hambre y el desamparo. El Apocalipsis entra por la ventana de nuestra habitación: hay un desorden en el aire que agita las cortinas, un vacío en la presencia de los muebles, una cacofonía de voces que no dicen nada. Es como si hubiéramos perdido las claves esenciales de la vida. Y el amor pierde su significado, reemplazado por acciones triviales. El Apocalipsis avanza en nuestros cuerpos como cáncer o esquizofrenia; las arterias no soportan la presión y estallan en el cerebro. Perdimos nuestra identidad sexual entre imágenes de sexo, nuestra alegría entre símbolos comerciales, nuestra salud en la contaminación del cigarrillo, nuestro apetito en alimentos envenenados.

Pero quizás esto aún no sea el Apocalipsis. El verdadero Apocalipsis es la indiferencia, es mirar a los ojos y no encontrarse, es hablar con las personas y no sentir resonancia alguna.

Estamos en medio de una tempestad, con miles de barcas hundiéndose entre los gritos de náufragos, sin esperanza ni ayuda, porque cada uno intenta salvarse solo.

El Apocalipsis se apodera de nuestro cuerpo, agarrota nuestras articulaciones, impregna nuestras células, y resurge en nuestras miradas.

La violencia contra la naturaleza es violencia contra nosotros mismos. La violencia no está solo en los asesinos, torturadores y delatores; está en todas partes: en la arquitectura, en las calles, en el volumen de la música electrónica, en nuestro trabajo alienante.

Hemos hecho un “pacto con la muerte” y nos esforzamos en mantenerlo. Nos hemos envuelto en un vasto programa de degradación. Sin embargo, a veces, en una tarde contaminada, entra por la ventana un rayo de sol, una sutil invitación al “pacto con la vida”.

*La percepción de que el Antiguo Testamento promueve la castración y la represión puede ser una interpretación errónea basada en una lectura superficial o fuera de contexto. Aquí hay algunos argumentos que podrían ayudar a entender mejor el Antiguo Testamento:

  1. Contexto Histórico y Cultural: El Antiguo Testamento fue escrito en un contexto histórico y cultural muy diferente al nuestro. Muchas de las leyes y normas reflejan las prácticas y necesidades de esa época.
  2. Propósito de las Leyes: Muchas leyes del Antiguo Testamento tenían como objetivo mantener la cohesión social y la pureza religiosa del pueblo de Israel. No necesariamente estaban destinadas a ser aplicadas de manera literal en todos los tiempos y contextos.
  3. Interpretación Teológica: En la tradición judeocristiana, se entiende que muchas de las leyes del Antiguo Testamento son simbólicas y apuntan a principios espirituales más profundos. Por ejemplo, las leyes sobre la pureza pueden interpretarse como una llamada a la santidad y la dedicación a Dios.
  4. Evolución de la Interpretación: A lo largo de los siglos, tanto el judaísmo como el cristianismo han desarrollado interpretaciones más matizadas y espirituales de estos textos. Los estudiosos y teólogos han trabajado para entender el significado más profundo detrás de las leyes y narrativas.
  5. Enfoque en el Amor y la Justicia: Muchos pasajes del Antiguo Testamento enfatizan el amor, la justicia y la misericordia. Profetas como Isaías, Jeremías y Amós hablaron en contra de la injusticia y la opresión, y llamaron al pueblo a vivir de acuerdo con los principios de justicia y compasión.

Es importante leer el Antiguo Testamento con una mente abierta y considerar las interpretaciones de los estudiosos y teólogos que han dedicado sus vidas a entender estos textos en profundidad.

Apuntes personales del Dr. Fabian Sorrentino, sobre el paper de Rolando Toro Araneda. Las ilustraciones