Desde el hombre maduro que tiene preferencia tanto por niñas como por mujeres adultas y hay también a quienes les gusta que su compañero sexual los domine, desde el culto caballero que colecciona objetos eróticos o aquella mujer que se estimula ante la belleza de otras mujeres, hasta el viejo que dice obscenidades a niñas o mujeres, y que se excita cuando la humillan y la golpean, hay una amplia gama de variaciones y desviaciones en la conducta sexual humana. Pero ¿Donde esta él limite entre lo simple y normal en preferencias y la conducta sexual pervertida?

Normalidad y anormalidad sexual
Un hombre es capaz de excitares sexualmente solo por el olor y la textura de unas botas altas de cuero y solo puede copular bien con una mujer si ella lleva puestas esas botas.

Una mujer no puede ser excitada sexualmente por un hombre, pero si se excita intensamente con un amante femenino y el orgasmo mediante la estimulación manual u oral de su clítoris por esta amante.

¿Estas cosas son algunas de las actividades sexuales normales o son trastornos sexuales? Esta pregunta no es fácil de contestar, ya que hay grandes desacuerdos en la definición de Normal. La mayoría de los conceptos de normal son útiles pero son limitados y tienen defectos al ser aplicados a las personas.

¿Hasta que punto son normales o anormales las fantasías eróticas de cada persona? ¿Cuáles son los criterios que podemos decir si una conducta es normal o anormal? ¿Qué es normal en el terreno de la sexualidad?

Ningún criterio de normalidad sexual tiene aceptación universal. Lo que es considerado como normal varia entre una cultura y otra, de un periodo histórico al otro, y hasta de un individuo a otro de la misma época. Solo hay un TABÚ, en la actividad sexual que es universal y es incesto entre la madre biológica y su hijo; pero el del padre e hija existen excepciones en las que se ha aceptado.

La casi limitada variedad de actividades sexuales aceptadas en los valores de las culturas no restringe la situación, sin embargo hay aun el esfuerzo por descubrir la normal frente a la anormal.

La normalidad sexual se define en función de las necesidades y características biológicas de una especie. Si nos sujetamos a este criterio, serian normales todas las prácticas sexuales que no son dañinas para prolongar la especie humana. No es difícil rechazar a este criterio con cualquier ejemplo de la práctica sexual extraño pero no debe impedir la fecundación. Tal vez un fetichista solo logra excitares si la mujer lleva calzado con elevados tacones de aguja; de este modo el hombre realiza coito normal. Esta conducta no pone en peligro a la especie humana, pero resulta contradictoria al admitir que sea una conducta normal sexual.

en este caso, para comprender que es la normalidad sexual se definiría el concepto de madurez emocional, que para muchos es de salud mental que va evolucionando desde la niñez, para así alcanzar el mismo potencial psíquico de una persona. Este permitiría a cada persona elegir una sexualidad totalmente aceptada que no tenga riesgos ni para ella o para la especie y hasta podría ser fuera de las normas culturales.

Es anormal todo aquello que va contra las buenas costumbres de la sexualidad de cada individuo.

Desviaciones y perversiones
No todas las desviaciones son perversiones. Una desviación tan solo es una anomalía un comportamiento no aceptado en un contexto cultural, y para que exista una perversión es necesario que haya un comportamiento que sustituya el cual es un factor indispensable para obtener placer sexual.

Causas biológicas de desviación sexual.
La investigación médica no proporciona datos acerca de la posibilidad de que las desviaciones sexuales sean hereditarias; sólo al caso del homosexualismo en el que hay estudios que dicen que existe un posible factor hereditario.

Las anomalías de los cromosomas que aparecen en el momento de la concepción pueden producir trastornos y estos podrían causar una conducta sexual anormal, y no hay pruebas de que estas conductas estén asociadas con las anomalías cromosómicas.

¿Cuál es la causa de la desviación sexual?, en algunos casos puede haber causas biológicas, pero las causas culturales de la desviación sexual son mucho más frecuentes. Después de todo, todos nacemos en una cultura, que nos enseña gran parte de las culturas sexuales.

En busca de una interpretación emocional:
Si, como individuo, estoy preso de una desviación sexual, es que deseo rechazar y reprimir una gran parte de mí ser, vivo constantemente una lucha interior. Por este hecho, mi cuerpo me dice que acepte cada aspecto de mí que asocio a un defecto.

Cada ser posee un lado masculino y un lado femenino. Cuando soy un hombre, acepto mi feminidad, o mi masculinidad cuando soy una mujer. Me vuelvo humilde, decido afirmarme. Elijo unificar todo mi ser porque cada faceta mía pide expresarse.

Las frustraciones, por su parte, son frecuentemente vinculadas a una educación muy estricta hacía todo lo que se refiere a la sexualidad, creo sinceramente que los órganos genitales son inmorales y sucios, vivo culpabilidad. Es preferible que acepte vivir mi sexualidad sanamente ya que forma parte de mi calidad de vida.

¿A qué llamamos perversiones sexuales?
Son actitudes sexuales que se caracterizan por intensas fantasías no convencionales, ya que involucran a objetos o seres no humanos, a personas que no podrían constituir una pareja sexual (como los niños), sentimientos humillantes o dolorosos, etc. Estas fantasías se dan en forma repetida, llevando a la concreción de actos que las involucren, y provocando un malestar personal y social, que puede afectar la vida laboral o de relación.

Esta psiquiatrización de la perversión está viciada en su método, son médicos y abogados los que han hecho esta clasificación con el objeto de responder a los problemas médico-legales resultantes de los actos delictivos y criminales cometidos por los perversos.

Los escritos de los perversos
El estudio de las perversiones se aborda con mayor provecho a través de la lectura de las obras escritas por los mismos perversos y por aquellos que han sabido reconocer en ellos al prójimo.

La estructura perversa
Al estudio de la perversión en sentido diacrónico desarrollado por – Freud – a partir de la hipótesis genética que lo conduce a considerar al niño como un «perverso polimorfo», se agrega más recientemente la contribución de – Lacan y sus alumnos – quienes han retomado la noción de perversión en términos de estructura, es decir en su dimensión sincrónica, en la articulación de las diferentes instancias psíquicas. En tal sentido, el perverso se caracteriza menos por sus prácticas sexuales (múltiples y contingentes, en realidad) que por una organización psíquica que no se limita a su vida exclusivamente erótica.

La relación del perverso con la Ley es particularmente significativa. Lejos de ignorarla producto de una supuesta debilidad del Súper-Yo, el perverso provoca y desafía la Ley. Así, él se asegura de su presencia y de que siempre se encuentre alguien que se la recuerde y lo sancione, lo que denunciará inmediatamente como abusivo. Pero si el perverso provoca e interroga, más allá del aparato legislativo de la sociedad, a aquél que es el soporte familiar de la Ley, el padre, es igualmente alguien preocupado por establecer los fundamentos mismos de la Ley y se convierte fácilmente en moralista.

En la estructura perversa ocupa un lugar eminente el placer, buscado, a veces de manera compulsiva, no sólo por sí mismo, sino sobre todo porque representa para el perverso una experiencia extrema, próxima a la angustia, que considera exenta del engaño y que constituye la verdadera realidad, una realidad más digna.

La perversión tiende así, en acuerdo con esta noción de estructura perversa, a desbordar el marco estrecho que le asignaba una nosografía descriptiva y designa un conjunto estructurado que no se limita a formas negativas y reprehensibles desde un punto de vista médico-legal, en particular las actividades estéticas.

¿Qué es una parafilia?
A las parafilias, desviaciones sexuales o perversiones se definen como un patrón de conductas sexuales en la que la fuente predominante de placer sexual no es a través de la cópula heterosexual. Esta es una definición que se acepto hasta hace algunos años, pero como la homosexualidad se le definió como una preferencia sexual en lugar de una parafilia, dejo de estar vigente.

Actualmente las parafilias se entienden como las conductas sexuales, eróticas que no son comprendidas por la mayoría de las personas. Así encontramos que hay parafilias que castiga la Sociedad como delitos y existen otras parafilias que aunque no son aceptadas tampoco se les considera un delito. Desde el punto de vista de la Psiquiatría y del Psicoanálisis las parafilias son consideradas «perversiones».

Tomando como referencia la primera definición encontramos que existen algunas parafilias que se pueden encontrar dentro de la sexualidad normal si se les practica esporádicamente o como juego amatorio que precede a la copula normal.

Las parafilias son un deseo incontrolable, impulsivo y compulsivo de realizar el acto o de fantasearlo. De hecho los individuos que la practican pueden parecer exteriormente tan normales como cualquier otra persona.

Si estos instintos parciales tienen fijaciones en la etapa pregenital (o regresiones), permanecerán como fuente dominante de gozo sexual en el adulto.Las tendencias para las parafilias existen en cada persona en forma latente y las causas por medio de las cuales se transforman en actos francos son dudosas. Las causas más comunes son la ansiedad de castración, conflictos de Edipo y otras anomalías del medio familiar durante la niñez. La mayoría de las parafilias son llevadas a cabo por varones, no quedando exentas las mujeres pero en mucho menor número, también se dice que hasta el 78 % de los casos hay alteraciones neuropsiquátricas en diferentes grados.

¿Qué parafilias están penadas?
El estado legal de las parafilias varía ampliamente de cultura en cultura y de país en país. Por ejemplo en Inglaterra y algunas ciudades de los Estados Unidos a la homosexualidad no se le considera un delito cuando esta se practica entre adultos que consientan a ello, en otros sitios aunque no es aceptada ampliamente es tolerada. La paidofilia, necrofilia, frouterismo y el exhibicionismo y otras parafilias son consideradas como delitos menores y en ocasiones como faltas administrativas por la ley.

Otras parafilias no son penadas mientras no afecten a terceras personas, siempre y cuando la pareja este de acuerdo (Ej.; fetichismo, urofilia y otras más)

¿Siempre han existido las parafilias?
Si, las parafilias siempre han existido desde que se tiene historia. Pero han surgido otras parafilias o sea han ido trasformando debido a los cambios que hay en las sociedades, así encontramos que cuando apareció el teléfono surgió una nueva parafilia, que es el realizar llamadas obscenas, (escatología telefónica) lo mismo sucede con la computadora y otros medios.

Por otra parte las relaciones sexuales con animales son prácticas realizadas como un inicio de la vida sexual en personas del campo, y no son consideradas como algo malo, en cambio en personas que viven en las ciudades, esta actividad puede considerarse como una enfermedad mental. Se han tipificado 138 parafilias, y cada vez hay más.

Paidofilia.- (pedofilia).- Es el deseo o gusto por tener relaciones sexuales con menores de edad (niños o niñas).
Los paidofilicos son personas que pueden tener familia, abusando también de ella, lo que es más común es que sea un homosexual. Los paidofilicos no tiene la capacidad para cortejar o relacionarse con mujeres por ser sumamente inseguros, las disfunciones eréctiles parciales, son sumemente comunes. Las relaciones paidofilicas pueden ser desde tocamientos hasta la penetración vaginal o anal, en algunas ocasiones asesinan a sus víctimas para evitar el ser descubiertos. Esta parafilia se caracteriza más que por la excitación sexual, por el uso y abuso del poder.

Necrofilia.- Se define como la obtención del placer sexual con cadáveres, generalmente por medio de la cópula con o sin mutilación subsiguiente.
Es una desviación rara. Esta parafilia es castigada por la ley. Los necrofílicos profanan tumbas, entran al servicio forense o bien asesinan a sus víctimas para posteriormente violarlas, cuando esto sucede se constituye como una forma extrema de sadismo, siendo el objeto sexual un fetiche. Si el cadáver es violado directamente eso implica que un trastorno muy profundo de la personalidad, por regla una psicosis. Aunque el necrofílico presenta escaso interés en las mujeres vivas, algunos pueden realizar el coito si la mujer permanece totalmente quieta, como si estuviera muerta.

Exhibicionismo.- (violadores a distancia) El exhibicionismo es una parafilia común que se describe como una exposición deliberada y compulsiva de los genitales en público, siempre por un varón como medio para alcanzar la satisfacción sexual. Las mujeres por lo general obtienen más placer al exhibir otras partes de su cuerpo. En esta parafilia la satisfacción sexual se alcanza por medio de la masturbación posterior a la exhibición. Al sujeto exhibicionista, lo que le excita es la reacción de la víctima que puede ser de sorpresa, asombro o miedo. La teoría psicoanalítica sostiene que el exhibicionismo es utilizado como la negación de la ansiedad de castración. El hombre busca tranquilizarse con la reacción de la audiencia femenina (a menudo niñas) de que él si tiene un pene y de que le temen debido a él. Cuando el exhibicionismo se presenta en la pre adolescencia (es común) no es una perversión.

Los exhibicionistas son por lo general hombres con personalidad inadecuada y tendencia sádica y sadomasoquistas. Ellos por lo general tienden a regresar al lugar de los hechos y por tanto son aprehendido y castigado por la ley.

Tratamiento:
Para este tipo de personas esta indicado el psicoanálisis, pero el pronóstico es malo ya que la ayuda es buscada raramente y de forma no voluntaria.

Masoquismo.- Es la parafilia que se complementa con la del sadismo en donde la persona tiene gran placer sexual al ser agredida físicamente, además de ser sometida por su agresor. Para Freud los masoquistas tienen fantasías destructivas que vuelven contra sí mismos.

Sadismo.- En esta parafilia la persona tiene gran placer sexual y excitación al agredir, someter, sobajar a su pareja.

Transvestismo.- Se limita al uso de ropas del sexo opuesto. Se refiere a hombres heterosexuales con fuertes impulsos y fantasías de vestirse con ropas femeninas para excitarse, agregado al coito o masturbación, se imagina que es al mismo tiempo el sujeto masculino y el objeto femenino de sus fantasías sexuales. Los transvestistas experimentan placer y relajamiento al portar ropas del sexo opuesto.

Voyeurismo o escoptofilia.- Consiste en obtener placer sexual observando los órganos sexuales y las actividades sexuales de otros, por lo general de mujeres. Los voyeuristas se masturban mientras observa el evento. Al voyeurista.No le gusta ir a playas nudistas donde es permitido ver el cuerpo desnudo, le excita lo prohibido de la acción. En el adolescente el voyeurismo es normal como parte de la búsqueda de excitación sexual. En el adulto los caracteres voyeuristas pueden ser normales como en el juego sexual antes de la copula y la excitación ocasionada al ver fotografías o películas pornográficas con su pareja. El desviado por otra parte obtiene satisfacción al cometer el acto en forma compulsiva e iterativa a los demás, a menudo con gran riesgo.

Fetichismo.- Se le define como la obtención del placer o excitación sexual a partir de objetos inanimados, por ejemplo zapatos o ropa íntima o con partes del cuerpo (pelo).El orgasmo puede ser espontáneo al ponerse en contacto con el fetiche o por la masturbación o la cópula en presencia del fetiche.

El fetichismo es una exageración de la evaluación acentuada normal de ciertas prendas asociadas con el objeto amado. La atención excesiva a ciertas partes del cuerpo femenino (mamas, nalgas piernas) se le conoce como parcialismo. La fetichista femenina en ocasiones se enfrasca en cleptomanía compulsiva que puede tener significados sexuales inconscientes.

Froteurismo.- (frotamiento): A esta parafilia se le describe como el gusto y excitación caracterizado por frotar el pene contra las nalgas o bien el cuerpo de una mujer. Esta parafilia es frecuente en lugares muy concurridos como puede ser el metro, los cines los estadios deportivos, etc. Este acto suele pasar desapercibido para la víctima. Los frotistas sólo son pervertidos si éste es el único modo de que obtenga el orgasmo.

Hipoxifilia o asfixiofilia.- Consiste en la excitación que le provoca a la persona el asfixiarse al momento de alcanzar el orgasmo. Se han dado casos en los que los parafilicos no dimensionan la gravedad del acto y llegan a consumar la asfixia.

Coprofilia, Coprofagia y Coprolalia.- La coprofilia es un interés anormal sexual en las heces, hay personas que a su pareja le piden que defeque en ellos durante el acto sexual.La coprofagia es un deseo de comer heces y la coprolalia es una verborrea compulsiva de obscenidades (síndrome de Gilles de la Tourette).

Estos trastornos se hallan a menudo asociados a otras perversiones. Por ejemplo un prerrequisito para la excitación sexual puede ser de origen sádico orinarse en el compañero durante el coito o que el compañero lo orine (urofilia), o vouyerista al observar las funciones excretoras. El orgasmo generalmente se alcanza por la masturbación.

Zoofilia o bestialilsmo.- La bestialidad consiste en obtener el placer sexual con los animales. Ya que poner en claro que este termino de define la excitación sexual al observar la actividad sexual de los animales, se refiere específicamente a copular con ellos. La zoofilia puede presentarse de forma ligera en algunas personas y es de forma transitoria. La bestialidad se presenta más comúnmente en individuos que viven en áreas rurales que se hallan socialmente aisladas, tiene una personalidad esquizoide o son francamente sicóticos o retardados mentales.

Sin embargo personas inteligentes y educadas pueden practicar esta desviación. Los animales más comúnmente involucrados son los domésticos, pero también han sido los de granja. Esta práctica puede no ser considerada una parafilia sino una práctica «normal» en algunas culturas.

Gerontofilia.-Se define a la gerontofilia como la obtención del placer sexual con una persona de mayor edad de cualquier sexo.

La gerontofilia es difícil de detectar ya que es común que una mujer joven se case con un anciano por amor o un joven con una anciana por amor, o en ambos casos por razones económicas conscientes. Pero si el individuo joven lo hace de forma compulsiva y exclusivamente prefiere una sucesión de compañeras o compañeros ancianos o mayores que él, constituye una perversión.

OTRO TIPO DE PERVERSIONES
Osmalagnia: Erotismo asociado a los olores nauseabundos.

Ofolagnia: Erotismo provocado por canciones o ruidos eróticos.

Vampirismo: Excitación erótica provocada por la sangre en las heridas.

Cleptolagnia: Placer erótico que se despierta con el hecho de robar.

Pirolagnia: Placer erótico asociado a los incendios.

Dentrofilia: Erotismo con plantas, árboles y vegetales.

Pigmalionismo: Búsqueda de situación sexual con las estatuas.

Tratamiento
Tratar las parafilias es un reto para la psicoterapia, la psiquiatría, la criminología y otras disciplinas, la finalidad es que el paciente abandone la parafilia que hace daño a terceras personas como lo son la paidofilia, exhibicionismo, frouterismo, voyeurismo etc.

Muchos pacientes pueden ser ayudados a vivir más satisfactoriamente que como se encuentran, alcanzando un mejor control consciente y autodiciplinado por medio de asesoramiento y de psicoterapia.

Medicamentos como anti sicóticos, antidepresivos o anti-androgénicos han dado buenos resultados en algunos pacientes. En la mayoría, el aislamiento social (cárcel) es lo único que evita se siga dañando a terceras personas. Las parafilias que no hacen daño a terceras personas en donde ambas partes de la pareja lo disfrutan y están de acuerdo en llevarlas a cabo no necesitan tratamiento alguno.

Delitos sexuales – perversiones
Tenemos que partir de la idea de que perversiones sexuales y delitos no son sinónimos.

Muchas perversiones no son castigadas por la ley, un claro ejemplo de esto es la homosexualidad femenina o el fetichismo, la cosa cambiara si van acompañados por algún tipo de violencia.

Así mismo los delitos sexuales no implican necesariamente un instinto pervertido, como es la verbigracia (relaciones sexuales entre un jovencito y una jovencita menores de 16 años)

Clínicamente no hay una línea divisoria entre las actividades sexuales normales y perversas.

Perversión:
El origen de la perversión puede ser debido a muchas causa; un desarrollo inadecuado en la infancia del individuo, influencia de factores internos o externos, ambiente familiar, falta de uno de los padres.

El problema fundamental es el desarrollo sexual del individuo.

Definiendo pues que las perversiones son trastornos del desarrollo del instinto sexual.

Es difícil administrar un tratamiento para este tipo de personas pero lo que esta claro es que el tratamiento no se suele administrar a los delincuentes sexuales, no sirve para ellos.

Delitos sexuales:
Los jóvenes raras veces incurren en delitos sexuales. Con mayor frecuencia son ellos los objetos o víctimas Los delitos sexuales que se presentan en los delincuentes juveniles, son cometidos del mismo modo y por la misma motivación psicológica que en el adulto.

Hemos de orientarnos en un tratamiento hacia la causa de la perturbación, y no hacia el comportamiento actual; esto ha sido en cierta medida aceptado.

Existen ciertos tipos de delitos sexuales que a la luz de una investigación superficial no cabe incluir lícitamente entre las perversiones. Sólo una investigación que atendiese a los motivos inconscientes podría decir si el comportamiento responde a meras circunstancias externas o a una exigencia perversa.

Delitos sexuales penados:
Agresión sexual, agresión a niños, incesto, luego veremos alguno de estos delitos más detenidamente.

Abusos sexuales desde niños:
El recurso de la violencia siempre ha existido, y es posible que siga existiendo en gran medida, pero ahora trataré el abuso sexual en menores.

Los estudiosos del tema que intentan hablar con las víctimas suelen enfrentarse con numerosos obstáculos.

El primero es el silencio, ya que muchas personas, tal vez demasiadas, callan al respecto, o le restan importancia argumentando que «no es ni mucho menos como dicen». Y en segundo, los virulentos sentimientos que estallan de forma invencible al tratar este asunto.

En casos muy concretos el asco, el rechazo, el horror y el afán de venganza son emociones tan intensas como la compasión que inspira el niño.

Hasta el momento, varios estudios nos han demostrado que los autores de abusos sexuales, por lo general, son los hombres «completamente normales»

De todas las edades y todos los estratos sociales. También se sabe que sólo un 6% de los abusos sexuales son cometidos por alguien desconocido por la víctima.

Por la sociedad en la que vivimos se ven reflejados los diferentes comportamientos hombre – mujer, y se transmite en los niños haciendo más débil en cierta parte al sexo femenino. Por esta razón muchas niñas son víctimas silenciosas de los abusos sexuales sin necesidad de forzarlas con violencia, y permanecen en silencio largo años, culpándose a si mismas de su estado, pues no entra dentro de sus esquemas que un adulto su padre incluso sea capaz de hacer algo «malo». La vergüenza, los remordimientos y la convicción de que sólo a ellas les ocurren esas cosas las atemoriza y no se atreven a contar a nadie los abusos sexuales que sufren por miedo a ser castigadas. Esto traumatiza a la niña durante toda su vida.

Abusar sexualmente de un niño-a se considera un «delito contra la libertad sexual»

Al parecer los niños se muestran incluso más reticentes que las niñas al hablar sobre sus experiencias, puesto que piensan que si salieran a la luz destruirían su imagen de hombres, dado que su papel de víctima no es en absoluto un atributo varonil.

También las mujeres son culpables, cometen abusos sexuales pero es menos frecuente y su comportamiento es menos violento, de modo que es más difícil de descubrir.

Los niños no tienen ninguna posibilidad de defenderse, y en otros casos su resistencia es aniquilada.

El abuso y su comportamiento
La idea de que sólo seres violentos, degenerados, antisociales y trastornados pueden abusar sexualmente de un menor es un prejuicio muy extendido entre la gente.

En realidad, los autores de esos actos no son de ninguna clase social determinada, ni tampoco son «monstruos sexuales»

Según el psicoterapeuta Rich Snowdon en sus informes sobre las experiencias médicas con hombres que han abusado sexualmente de menores dice que personas completamente normales.

Como detectar un abuso sexual:

Los niños sometidos ha abusos sexuales no suelen atreverse a mostrar abiertamente lo que les está sucediendo, ya que el autor de los abusos les obliga aguardar silencio. Por esa razón emite mensajes en clave, muchas veces sin ser plenamente consciente de ello.

Conclusiones
La sexualidad humana constituye un fenómeno psicológico que no se limita a los mecanismos de cortejo, cópula y reproducción.

Abarca toda una gama de aspectos sociales, religiosos y jurídicos, y así mismo se halla estrechamente vinculada al mundo de la afectividad y al plano de los valores.

Durante la infancia, dentro del proceso llamado de socialización, en el que el individuo aprende y asume la cultura de la sociedad a la que pertenece, se van asimilando las pautas de comportamiento que diferencian la sexualidad masculina de la femenina; el comportamiento sexual humano específico viene así determinado por factores tanto culturales como biológicos. Las pautas instintivas se hacen más flexibles, permitiendo una mayor intervención del aprendizaje y dando lugar a conductas sexuales diferenciadas.

El estudio de la sexualidad en sus aspectos psicobiológicos adquirió gran importancia a partir de las teorías enunciadas por – Sigmun Freud – que la consideró motor y elemento esencial de la actividad humana.

Glosario
1.  ANOMALÍA cromosómica: Es una irregularidad en los factores hereditarios.
2. HETEROSEXUAL: Persona que se siente atraída por el sexo opuesto.
3. HOMOSEXUALIDAD: Estado de los individuos que sólo son atraídos sexualmente por personas de su propio sexo.
4. INCESTO: Unión sexual entre parientes dentro de los grados en que está prohibido el matrimonio.
5. MASOQUISMO: Perversión sexual del que goza con verse maltratado por una persona.
6. NECRÓFILA: Coito con un cadáver, deseo anormal hacia los cuerpos muertos.
7. SADISMO: Placer mal sano en ver o hacer sufrir al prójimo, se considera como una perversión sexual.
8. TABÚ: Objetos, series o actos que hay que evitar por ser considerados sagrados.
9. TRANSTORNO: Desviación psicológica.
10. VIOLACIÓN: Abuso de una persona por violencia o astucia

Bibliografía
«Hacia la Psicología Jurídica en Bolivia» Roberto Agreda Maldonado 2004
«Abusos sexuales en los niños». De Beate Bestes.
Von Hentig (1948).
«Variaciones y Desviaciones de la conducta sexual» Preparatoria Monte Alban
«Perversión y Estética» Pedro Alzuru
«Las semillas de la violencia», Luis Rojas Marcos.
«Intervención comunitaria con víctimas de delitos», Sánchez Vidal
Asistencia de víctimas de agresiones sexuales. Fono: 923 – 260599. Salamanca.

«Los seres humanos son capaces de entrar en el dolor ajeno e imaginarse lo que siente el que sufre… Nadie se habría preocupado de liberar a los esclavos a no ser que, de forma imaginaria, se hubiera podido poner en el lugar del esclavo… Esta es precisamente la base sobre la que se apoya la capacidad del hombre para la crueldad. Su deseo de torturar y humillar a otro ser, sobre el que ya tiene poder, está claramente relacionado con su habilidad para entrar imaginariamente en la agonía de la víctima» Anthony Storr, La agresión humana, 1968.

Perversión y estética
La perversión se define clásicamente como desviación del instinto sexual. Su estudio sistemático se ha propuesto una clasificación descriptiva, una nomenclatura de las perversiones. Encontramos que la perversión concierne al objeto sexual: la pareja sexual elegida puede ser un individuo del mismo sexo, muy joven o muy viejo y hasta un cadáver. El objeto sexual puede igualmente ser un animal, la ropa, zapatos y objetos del otro sexo, el perverso puede también ponerse estas vestimentas. La práctica sexual misma puede pervertirse: mostrar los órganos genitales, buscar el sufrimiento de la pareja, erotizar el propio sufrimiento, la participación de un tercero o de varios en el acto sexual, la multiplicación de estos actos, la mezcla de la orina y las heces en estos actos, etc. Sin olvidar que estas prácticas frecuentemente se asocian unas con otras.

Esta enumeración constituye en sí misma una interpretación implícita de la perversión, pues supone un orden natural del instinto sexual que sería definible en comparación con las prácticas de los animales o a través de investigaciones estadísticas. Toda desviación estaría entonces ligada a un substrato orgánico, a una degeneración constitucional que conviene distinguir de los otros estigmas morfológicos o morales y que probablemente se origina por transmisión o debido a una predisposición hereditaria.

Fuente: Monografías