Este artículo es la continuación de la introducción a la Ontología de la Conciencia que invitamos a leer, para comprender el marco teórico-aplicado de alta complejidad, cuyo objetivo central es modelar la evolución intencional del Ser.

Un mapa vivo para diseñar el Ser en el presente

La ODC inicia el análisis con una delimitación conceptual rigurosa del acrónimo, seguido por la postulación de su base post-metafísica y la consecuente posición de las Maestrías a desarrollar como parte de esta estructura.

1. Desambiguación  de la sigla: ODC

El acrónimo ODC exhibe una marcada polisemia a través de diversos dominios del conocimiento.

En la biología celular, ODC se refiere a la Ornitina Descarboxilasa, una enzima clave en rutas biosintéticas.1

En el ámbito de las ciencias de la información, el mismo acrónimo se ha empleado históricamente para referirse a la Organización Documental del Conocimiento.2 Incluso en la práctica comercial, ODC puede ser asociado a clínicas odontológicas.3

Sin embargo, en el contexto de la filosofía aplicada y el desarrollo humano, ODC es definido aquí como la Ontología de la Conciencia. a la que podríamos encontrarle una definición más precisa dado su función específica: Ontología del Desarrollo de la Conciencia

Esta adopción no es arbitraria, sino que establece un requisito de rigor conceptual. La referencia a la Organización Documental del Conocimiento se convierte, paradójicamente, en una justificación estructural para el modelo propuesto.

El desarrollo intencional de la Conciencia, para alcanzar el carácter de maestría, debe poseer la misma «Concepción lógico-lingüística» y un marco conceptual riguroso que se exige a la documentación y organización del saber. Esta legitimación asegura que este desarrollo epistemológico sea tratado como una ciencia de la organización del conocimiento del Ser, estableciendo que la estructura del pensamiento y del Ser (Ontología) evoluciona de forma medible y diseñable.

2. El Fundamento Epistémico de nuestra propuesta:

Ontología Posmetafísica y la Física de la Información Generativa

Nuestra visión de una ODC para los integrantes de SONRÍA adopta los fundamentos previos de la Ontología del Lenguaje (ODL), la cual se define como una ontología no metafísica o posmetafísica. Esta distinción es crucial y se opone a la tradición filosófica occidental que asume un «Ser» fijo y un lenguaje meramente descriptivo.

  1. El Ser como Devenir: El Ser humano no se define por una esencia inmutable o dada, sino que es un devenir constante. Los seres humanos se recrean a sí mismos en el lenguaje y a través de él.

  2. El Lenguaje como Generativo: El lenguaje es interpretado como una fuerza activa y recreadora , que no solo describe la realidad, sino que la transforma y genera nuevas posibilidades sociales. 

La base para la transformación (desde nuestra mirada) se complementa con el aporte de las 7 interdisciplinas fundantes para acompañar los procesos humanos, enraizados en la Física de la Información, que declara: «Toda información requiere un soporte físico y toda transformación de información es un proceso físico.» (Rolf Landauer – John Archibald Wheeler).

La Conciencia, por tanto, no es un subproducto inexplicable, sino el resultado de un «elevado nivel de desarrollo» donde el «trabajo de su información puede desarrollarse en conciencia».

Esta cosmovisión de la vida como «un código informacional de reprogramación intencional y generativa de la matriz existencial»  es a mi consideración bastante desasertado para definir al género humano, sin embargo representa hoy un paradigma vigente que sería necio negar.

3. Delineación Conceptual Interdisciplinaria

Las siete interdisciplinas que componen el currículo de la ODC no son materias aisladas, sino un espectro integrado que cubre el desarrollo completo del Ser, desde su fundamento filosófico hasta su manifestación ética y activa. Son esenciales para la navegación compleja y la alta exigencia praxeológica que demanda el entrenamiento de maestrías para la transformación humana.

A. El Eje Fundacional: de las Interdisciplinas y su Interdependencia

La estructura séptuple de la ODC se justifica al abarcar las dimensiones esenciales del Ser: la existencia (Filosófica), la distinción (Lingüística), la sensación (Fenomenológica), la comprensión (Interpretativa), la conexión (Sistémica), la eficacia (Activa) y la dirección (Ética).

Estas disciplinas se agrupan funcionalmente en tres grupos para facilitar los procesos de transformación:

  • Grupo 1: Disciplinas Fundamentales (Definición del Ser): Enfocadas en la identidad y la percepción del observador.
    (Lógica, Neuropsicología, Epistemología y Dinámica Cuántica)

  • Grupo 2: Disciplinas Operacionales (Implementación de la Transformación): Enfocadas en la acción, el contexto y la efectividad. (Semiótica y Fenomenología)

  • Grupo 3: Disciplina Trascendental (Orientación del Propósito): Enfocada en la alineación de la Maestría con fines superiores. (Bioética basada en Principios Teofilosóficos)

Aquí te encontarás con la descripción de cada una de las disciplinas que conforman la ODC.

B. Mapa Detallado de las Siete Interdisciplinas

C. El Sentido de dicha Clasificación.

Grupo 1: Las Disciplinas Fundamentales
Establecen la definición del Ser, configurando su identidad y la manera en que percibe lo que observa.

Una Epistemología de carácter Ontológico estudia cómo el observador valida y estructura el conocimiento. Definiendo los criterios de verdad y sentido. Su Rol es definir la arquitectura cognitiva del Ser y la existencia. Esto se traduce en la capacidad de declarar el Ser no como una esencia fija o resultado histórico, sino como un proyecto de diseño continuo. El Mentor Coach comprende así que su identidad es un acto lingüístico sostenido en el tiempo.

La Semiótica-Lingüística analiza cómo el lenguaje modela la identidad y la interpretación. Diseñando distinciones y creando nuevos lenguajes funcionales que reorganizan los sistemas y revelan posibilidades previamente invisibles. Esto exige una gestión de la información verbal tan precisa como la organización documental. Su rol es el puente entre percepción y expresión del Ser.

La Fenomenología aborda la experiencia subjetiva, integrando cuerpo, emoción y percepción. El tránsito en el presente implica la calibración somática avanzada, donde el cuerpo no es solo un receptor pasivo de emociones, sino un generador activo y sostenible de la energía emocional requerida (coherencia energética) para materializar las declaraciones transformadoras. Su rol es la arquitectura cognitiva del Ser.

La Hermenéutica de estas disciplinas transforma la percepción del contexto y la narrativa del observador. Esto implica desmantelar las narrativas históricas o sistémicas que restringen la acción y forjar una nueva historia sistémica, lo cual es vital para el desarrollo de la conciencia.

Grupo 2: Las Disciplinas Operacionales Hermenéuticas
Son las responsables de llevar a cabo la transformación, articulando la acción, la lectura del contexto y la efectividad en los resultados.

La Neuropsicología Ontológica estudia los patrones mentales y emocionales que habilitan o bloquean la transformación.
Su rol es el motor interno del cambio.

La Lógica Matemática-Semántica proporciona estructuras formales para modelar procesos, decisiones y coherencia.
Su rol es la herramienta de precisión y consistencia operativa.

Mientras la Dinámica Cuántica aporta los modelos de interacción, probabilidad y resonancia en los sistemas complejos. Tornándonos concientes de la interdependencias dentro de un marco organizacional o social.

Quien vive en el presente opera como un arquitecto de sistemas, identificando los puntos de palanca con la máxima eficacia para generar cambios no lineales. Por eso, su rol es el marco para comprender la transformación en niveles sutiles y no lineales. Dr. Fabián Sorrentino.

La praxeología de estas disciplinas se ocupa de la efectividad en la acción, especialmente en contextos complejos y adversos. No define al Ser ni orienta el propósito trascendental, sino que optimiza la ejecución de compromisos y resultados. Es la ciencia de la acción eficaz que aporta protocolos, secuencias y criterios para cumplir lo declarado. Garantizando la efectividad, dominando sobre la ejecución de los compromisos complejos y la generación de los resultados declarados, incluso ante la adversidad.

Grupo 3: Una Ética Trascendental
Una BioÉtica basada en virtudes funciona como disciplina orientadora del propósito, alineando con fines superiores. Integrando los principios éticos y espirituales para orientar la acción hacia el bien mayor. Su rol es la brújula trascendental que alinea nuestras maestrías con un propósito social evolutivo.

La creación de nuevos contextos y realidades basadas en el bienestar colectivo y el propósito trascendente exige una responsabilidad extrema orientada a maximizar el desarrollo de la conciencia en el entorno.


4. El tránsito del presente a través de las 7 interdiciplinas

Vivir aquí y ahora representa una metamorfosis del observador, pasando de ser un agente que gestiona su existencia a un agente que la diseña intencionalmente. Este flujo se manifiesta de manera específica en cada una de las siete interdisciplinas, demostrando la integración total del modelo ODC.

Esto implica la liberación del observador de las restricciones históricas y las narrativas heredadas. El Ser ya no se define por lo que ha sido o por las categorías que la sociedad le ha impuesto, sino por la autoridad con la que declara y acciona en la realización de un proyecto transformador.

Vivir aquí y ahora: Eje Fundacional (Ser y Lenguaje)

El maestro no busca la verdad de su Ser, sino que la establece. Esto permite moverse en contextos de incertidumbre con una solidez de identidad inquebrantable, necesaria para liderar la reconfiguración sistémica.

A nivel semiótico-lingüístico, no se limita a escuchar brechas; las declara cerradas mediante el diseño de nuevas redes de compromisos y la articulación de distinciones que obligan al sistema a operar bajo nuevas reglas. Esto requiere una capacidad para la organización lógico-conceptual tan rigurosa como la gestión del conocimiento documental. La efectividad de M4 se basa en su capacidad de fundar nuevas realidades a través de actos del habla que poseen autoridad sistémica.

El ahora en la Fenomenología y la Hermenéutica

La Fenomenología transforma al cuerpo en un instrumento de navegación y transmisión de la información del sistema. El maestro no experimenta emociones al azar, sino que ejerce la maestría para generar intencionalmente el estado de ánimo (por ejemplo, confianza radical, audacia sistémica o calma estratégica) que el contexto requiere para procesar información compleja y permitir el avance. El dominio fenomenológico garantiza la coherencia energética necesaria para sostener las declaraciones de transformación.

En la Hermenéutica (interpretación profunda de significados humanos), el tránsito se centra en la capacidad de reinterpretar el fracaso, la adversidad o las limitaciones del sistema no como obstáculos definitivos, sino como retroalimentación informacional esencial. El presente permite cambiar la historia colectiva o la narrativa fundacional que limita la acción, garantizando que toda interpretación se oriente hacia la posibilidad generativa.

Tránsito del presente en el Eje Operacional (Contexto y Acción) en la Sistémica y la Praxeología

La Dinámica Sistémica del presente es la aplicación de la ingeniería ontológica. El practicante diseña conscientemente estructuras (organizacionales, familiares o comunitarias) que, por su diseño intrínseco, favorecen el desarrollo de la conciencia en sus componentes. Esto implica una ingeniería de relaciones, flujos de información y bucles de retroalimentación que reemplazan las intervenciones superficiales. La Maestría sistémica es la habilidad para orquestar la transformación de manera que el sistema entero evolucione a un nivel superior de procesamiento de información.

Su Praxeología se define por la capacidad de mantener la coherencia absoluta entre la Declaración (el futuro diseñado) y la ejecución (la acción presente). Esto se traduce en la «Garantía de Cumplimiento en Redes de Alta Complejidad.» En M4, la gestión de la ineficacia o el fracaso se transforma en la re-generación inmediata y estratégica de nuevos compromisos de acción, asegurando que la acción siempre impulse el sistema hacia el futuro declarado, sin caer en la inercia del pasado.

Integración Causal: La Maestría como Agente Transformador

El éxito de vivir en el presente se basa en una retroalimentación constante y causal entre los dominios fundacionales y los operacionales. La claridad ontológica (Ontología, Semiótica, Fenomenología) permite al agente articular un futuro con una precisión conceptual y una solidez energética inigualable. Esta claridad, a su vez, impulsa la eficacia sistémica (Hermenéutica, Sistémica, Praxeología).

El presente es la prueba de que el diseño conceptual puede materializarse en el mundo físico y que el desarrollo de la conciencia tiene la capacidad de reescribir tanto la biología (patrones de acción ) como el contexto sistémico.

Tránsito del presente en la Ética (Responsabilidad Trascendental)

El poder generativo del presente equiere un anclaje ético riguroso. La maestría ética no refiere solo cumplir normas, sino asegurar que la creación de nuevas realidades (el futuro declarado) se alinee con propósitos que trascienden el beneficio individual y favorecen el desarrollo de la conciencia en un ámbito más amplio.

Esta es la responsabilidad que conlleva la capacidad de diseño de realidad, garantizando que el Ser actúe como un canal para el desarrollo integral y no solo como un maximizador de resultados personales.


5. Conclusiones y Proyecciones Futuras de la ODC

Hacia una Integración de la Complejidad

Vivir en el presente a través de las siete interdisciplinas revela que este nivel no es simplemente una acumulación de habilidades, sino una integración cualitativa que transforma a la persona en un agente de cambio sistémico. El presente es el pináculo de la transformación personal en función de la transformación del entorno. Al dominar las disciplinas fundamentales (Ontología, Lingüística, Fenomenología) nos establecemos en una base sólida de coherencia informacional.

Esta coherencia se traduce en la capacidad generativa de las disciplinas operacionales (Hermenéutica, Sistémica, Praxeología), permitiendo al maestro no solo comprender las redes complejas, sino rediseñarlas a través de actos declarativos con autoridad.

El anclaje final en la Ética asegura que este poder de diseño sirva a fines trascendentes.

Proyección Académica del Modelo

La adopción formal de este Marco Teórico/Conceptual posiciona la Ontología del Desarrollo de la Conciencia en el cruce de la teoría de sistemas, la filosofía avanzada y la neurociencia cognitiva.

Al establecer que la conciencia es el resultado de un «trabajo de la información» abriendo caminos para la investigación empírica sobre los correlatos neuronales y somáticos de las distinciones ontológicas (Semiótica) y la gestión intencional de los estados de ánimo (Fenomenología), aparecen elementos que tienen paralelos en la regulación bioquímica del desarrollo.

La ODC deja así de ser un modelo puramente filosófico para convertirse en un objeto de estudio potencialmente cuantificable bajo el lente de la ingeniería de sistemas complejos y la física de la información.

El desafío futuro de la ODC será seguir desarrollando métricas robustas para medir su eficacia en la reconfiguración de los sistemas organizacionales y sociales.

Un desarrollo del Dr. Fabián Sorrentino para concebir la ODC como una epistemología justificada.

Referencias:

Landauer, R. W. (1961). Irreversibility and heat generation in the computing process. IBM Journal of Research and Development, 5(3), 183–191. https://doi.org/10.1147/rd.53.0183

Miller-Fleming, L., Olin-Sandoval, V., Campbell, K., & Ralser, M. (2015). Remaining mysteries of molecular biology: The role of polyamines in the cell. Journal of Molecular Biology, 427(21), 3389–3406. https://doi.org/10.1016/j.jmb.2015.06.020

Wheeler, J. A. (1989). Information, physics, quantum: The search for links. En W. H. Zurek (Ed.), Complexity, entropy, and the physics of information (pp. 309–336). Addison-Wesley.

Sorrentino, F. (2025). Ontología del desarrollo de la conciencia (ODC): Marco teórico-aplicado para la evolución intencional del Ser [Manuscrito inédito].