David Hume nació el 7 de mayo de 1711, en el pueblo de Edimburgo, ubicado en Escocia. Su padre era un abogado y su madre una ama de casa. Desde pequeño mostró interés por el estudio y la lectura. Estudió en la Universidad de Edimburgo, donde se formó en derecho, historia y filosofía. Sin embargo, no terminó sus estudios ni ejerció ninguna profesión. Se dedicó a viajar por Europa y a escribir sus obras filosóficas.

En 1739, publicó su obra más famosa: Tratado de la naturaleza humana, donde expuso su sistema filosófico basado en el empirismo, el escepticismo y el naturalismo. Sin embargo, esta obra no tuvo éxito ni reconocimiento en su época. En 1748, publicó una versión más breve y accesible de su pensamiento: Investigación sobre el entendimiento humano, donde expuso su teoría del conocimiento, su crítica a la causalidad y su defensa del libre albedrío.

En 1751, publicó otra obra importante: Investigación sobre los principios de la moral, donde expuso su teoría de la moralidad, su crítica a la razón y su defensa de las pasiones. En 1752, publicó otra obra relevante: Ensayos políticos, donde expuso su teoría política, su crítica al contrato social y su defensa del gobierno moderado.

En 1754, inició la publicación de su obra más ambiciosa: Historia de Inglaterra, donde narró los acontecimientos históricos desde la invasión romana hasta la revolución gloriosa. Esta obra le valió el reconocimiento como historiador y le proporcionó una buena situación económica.

En 1763, fue nombrado secretario de la embajada británica en París, donde conoció a figuras como Voltaire y Rousseau. En 1766, regresó a Inglaterra con Rousseau, pero pronto se enemistaron por cuestiones personales. En 1769, se retiró a Edimburgo, donde vivió sus últimos años rodeado de amigos y admiradores. Murió el 25 de agosto de 1776, a causa de un cáncer.

La filosofía de Hume se caracteriza por su empirismo radical, es decir, por afirmar que todo el conocimiento proviene de la experiencia sensible. Hume rechazó la idea de que existan ideas innatas o principios universales en la mente humana. En cambio, sostuvo que al nacer la mente es como una tabula rasa o una hoja en blanco, sobre la que se van escribiendo las impresiones que recibimos a través de los sentidos. Estas impresiones se convierten en ideas simples o complejas, que son los contenidos básicos del pensamiento.

Hume también se distinguió por su escepticismo moderado, es decir, por afirmar que no hay certeza ni fundamento para el conocimiento humano. Hume cuestionó las nociones de causa y efecto, sustancia y esencia, alma e identidad personal, que consideraba meras creencias o hábitos sin base racional ni empírica. Sin embargo, Hume no negó la existencia ni la utilidad de estas nociones para la vida práctica. Reconoció que el ser humano está guiado por las pasiones y la costumbre más que por la razón.

Hume también se destacó por su naturalismo moral e histórico, es decir, por afirmar que la moralidad y la historia son fenómenos naturales que dependen de las circunstancias y las emociones humanas. Hume negó que exista una ley moral universal o una providencia divina que rija el destino humano. En cambio, afirmó que los juicios morales son expresiones subjetivas del sentimiento o del gusto moral. Asimismo, afirmó que los hechos históricos son interpretaciones parciales y contingentes del pasado humano.

La influencia de Hume fue enorme tanto en su época como en las posteriores. Sus ideas inspiraron a los ilustrados escoceses como Adam Smith y Thomas Reid, así como a los empiristas ingleses como John Locke y George Berkeley. Su pensamiento también ha marcado el desarrollo de la filosofía analítica, la filosofía de la ciencia, la ética y la epistemología en el mundo occidental.

Compilado por Fabián Sorrentino de las siguientes fuentes
https://www.biografiasyvidas.com/biografia/h/hume.htm

Hume, David


https://plato.stanford.edu/entries/hume/
https://www.britannica.com/biography/David-Hume