¿Tiene la sonrisa una relación directa con el desarrollo de las Inteligencias?

En primera instancia una sonrisa puede cultivarse escuchando, leyendo chistes, anécdotas y moralejas, las cuales sirven para el sano ejercicio de la reflexión. Así es como la persona se convierte en un buscador de humor, tratando de proveerse de material activamente, de leer o escuchar mas chistes.

Un proceso más elaborado, consiste en la risa compartida. En la medida en que una persona logra cierta experiencia contando historias y chistes, generará sonrisas en el grupo de gente que la rodea.

Con el tiempo, esas personas, comienzan a sentir que la opinión del entorno respecto de ellas se vuelve más favorable. Sus compañeros comienzan a pensar que ese es un sujeto simpático, y el grado de empatía de la gente hacia estas personas crece considerablemente.

Otras veces, la sonrisa sirve como un soporte, como una palanca para afrontar de manera positiva los problemas de la vida.

En una etapa avanzada, la SONRISA, tal como expresa Howard Gardner, es un ejercicio intelectual que pone de manifiesto el desarrollo pleno de las facultades humanas.

Por eso, para generar estados de excitación, placer, curiosidad, aprendizaje y relajación, solo ríe a mandíbula suelta. Esto generará en ti “endorfinas”: La “morfina” capaz de generar en nuestro cuerpo y en tu interlocutor un inmenso placer contagiable.
Si sientes predisposición a utilizar al humor como actividad cotidiana de tu vida, experimentarás un mayor aprendizaje y sentirás que todo se hace más agradable, traduciéndose en un aumento de tu calidad de vida.

Después de esta breve introducción: ¿Qué importancia tiene para ti dar y recibir sonrisas?, ¿Con qué frecuencia las ofreces y las recibes?

Lista de Ejercicios para reconectar con la Sonrisa Genuina

  1. Diario de Gratitud
    • Escribe diariamente tres cosas por las que estás agradecido. Este ejercicio te ayudará a enfocarte en lo positivo y a cultivar una mentalidad que favorezca la sonrisa.
  2. Sonrisa Consciente
    • Dedica unos minutos al día a sonreír frente al espejo. Observa cómo te sientes al hacerlo y permite que esa sonrisa se convierta en un hábito.
  3. Actos de Bondad
    • Realiza una acción amable cada día, ya sea ayudar a un amigo o hacer un cumplido a un extraño. Estas acciones no solo generarán sonrisas en los demás, sino que también te harán sentir bien contigo mismo.
  4. Ejercicio Físico
    • Incorpora actividad física a tu rutina diaria, como bailar, correr o practicar yoga. El ejercicio libera endorfinas, lo que puede inducir sonrisas genuinas.
  5. Meditación de la Sonrisa
    • Practica una meditación enfocada en la sonrisa. Imagina cómo se siente sonreír y permite que esa sensación se expanda por todo tu cuerpo.
  6. Visualización Positiva
    • Dedica unos minutos a visualizar momentos felices o situaciones que te hagan reír. Esto puede ayudarte a evocar una sonrisa genuina y mejorar tu estado de ánimo.
  7. Risa Contagiosa
    • Pasa tiempo con personas que te hagan reír y sonreír. La risa es contagiosa, y rodearte de personas positivas puede facilitar la reconexión con tu sonrisa genuina.
  8. Cuidado Personal
    • Dedica tiempo a cuidar tu salud dental y personal. Una buena higiene bucal y el autocuidado pueden aumentar tu confianza para mostrar tu sonrisa al mundo.
  9. Mindfulness en las Interacciones
    • Practica la atención plena durante las interacciones sociales. Escucha activamente y responde con una sonrisa, permitiendo que tus emociones fluyan naturalmente.
  10. Desafío de Sonrisas
    • Establece un desafío personal para sonreír intencionalmente al menos 10 veces al día, incluso en situaciones desafiantes. Observa cómo esto afecta tu estado emocional y el de quienes te rodean.

Si lo que buscas es aplicar la sonrisa al desarrollo de la inteligencia te recomiendo este artículo: ¿Cómo la sonrisa alimenta la Inteligencia?
Qué la Vida, te SONRIA 😉