Afección que provoca tos y pérdidas nasales. Da también agujetas, cansancio; la nariz se obstruye. Es muy frecuente y contagiosa. Ya que un germen o un virus están afectando mi organismo, esto revela un fallo de mi sistema inmunitario. Esto puede proceder de la confusión de mis pensamientos, del hecho que “ya no sé por dónde empezar”. Entonces me pregunto cómo hacer.

El resfriado me aporta entonces un tiempo de respiro en el cual puedo “protegerme” de la gente durante cierto tiempo y “conservar mis distancias”. Ya que hay liberación de secreciones, vivo probablemente una situación emocional particular que me afecta y frente a la cual vivo lleno de emociones que sólo quieren ser liberadas.

¿Hay algo sobre lo cual realmente quiero llorar sin admitirlo? ¿Ya que mi nariz está obstruida, hay una persona o una situación que “me huele mal” y que quiero evitar oler?

Vamos a la practica:

La biodescodificación del resfriado se enfoca en la conexión entre nuestras emociones y manifestaciones físicas como el resfriado. Según esta perspectiva, los síntomas del resfriado no son solo una casualidad, sino una expresión de conflictos emocionales no resueltos. Aquí hay una interpretación general de cómo se podría ver la biodescodificación de un resfriado:

  • Congestión nasal: puede simbolizar el deseo de escapar de una situación desagradable o el rechazo a un ambiente específico.
  • Nariz irritada: podría indicar una saturación emocional, como estar harto de una situación.
  • Dolor de garganta: dificultad para “tragar” o aceptar una situación conflictiva.
  • Tos con dolor de cuello: remordimiento por haber dicho algo inapropiado o el deseo de haber guardado silencio.
  • Goteo nasal y estornudos: rechazo hacia los cambios o situaciones amenazantes percibidas en el entorno.
  • Escalofríos: sentimientos de vulnerabilidad o soledad, como sentirse desprotegido ante las adversidades.
  • Dolor de oídos: “Lo que escucho me duele”, podría indicar una negativa a aceptar críticas o verdades incómodas.
  • Ojos llorosos: tristeza o el rechazo hacia lo que se ve en el entorno.
  • Fiebre: señal de frustración o deseo de atención, manifestando internamente un “no me hacen caso”.

La fiebre, en particular, es vista como un reflejo físico de una acumulación interna de ira y frustraciónCuando hay una carencia de “calor esencial” en nuestras vidas, simbolizado por la falta de afecto, atención y cuidados emocionales, la fiebre actuaría como un mecanismo compensatorio12.

El resfriado puede afectar tanto el pecho (el cuerpo) como la cabeza (mente) y puede que haya un desequilibrio porque pongo toda mi atención en el uno ignorando el otro. Necesito un tiempo de pausa para permitirme ver claro en mi vida. Necesito recuperar fuerzas. Adopto nuevas actitudes y nuevos comportamientos.

Hago la limpieza en mi vida y dejo de dejarme influenciar por las creencias populares (“el resfriado golpea fuerte este invierno!” o “siempre tengo un resfriado cuando llega el mes de diciembre”). La armonía así puede instalarse y me vuelvo dueño de mi vida.

Compilado por Fabian Sorrentino.