La nuca es la región de mi cuerpo por donde todas las energías (ondas) deben pasar para ir a repartirse en todo mi cuerpo. La nuca está en la cumbre de mi columna vertebral. Mi columna es el soporte, la estructura de mi cuerpo. Mi nuca es pues el pivote de mi cabeza.

Una nuca tiesa es una demostración de un rehúso o de una obstrucción de energía. La cabeza ya no puede girar en diversas direcciones. Puedo tener la sensación de carecer de apoyo y tengo tendencia a mostrarme obstinado y rígido en mi modo de pensar. Esto me lleva a estar pasivo, evitando poner cosas en marcha y ponerme a actuar.

Debo dejar circular estos pensamientos diversos que bloquean mi cabeza y que sólo piden estar puestas en práctica por mi cuerpo físico. Tengo la sensación de no tener todas las cualidades necesarias a la realización de mis deseos e ideas que corren el riesgo de estar al estado de “proyecto” o de “sueño irrealizable”. Por lo tanto esta rigidez me dice que debo estar más flexible en mis pensamientos y mis emociones. Debo aceptar las diferentes sensaciones que vienen a mí y dejarlas fluir libremente.

La nuca permite a mi cabeza contemplar diferentes opciones de la vida o diferentes paisajes, sin crítica ni juicio, en toda libertad, como un río permite al agua correr en él en un va y ven perpetuo, sin coacción ni restricción.

Ahora que acepto todas las riquezas que tengo en el interior mío, ya no me tengo que preocupar de lo que los demás piensan de mí porque estoy ahora plenamente consciente de todo el potencial que me habita.

El conficto de la Artrosis Cervical es un desacuerdo, entre lo que pienso y lo que hago. Resentir: “Pienso una cosa, pero con mis manos hago otra”  Mi flexibilidad, mi capacidad para ver varios lados de las situaciones de la vida.

El cuello representa la capacidad de ser flexibles en nuestra manera de pensar, de ver los diversos aspectos de una cuestión y de aceptar que otras personas tengan puntos de vista diferentes. Cuando hay problemas con el cuello, generalmente significan que nos hemos «atrincherado» en nuestro concepto de una situación.

Cada vez que veo a alguien que lleva uno de esos «cuellos» ortopédicos, sé que es una persona muy presuntuosa, que se obstina en no ver el otro lado de las cosas. Virginia Satir, una brillante terapeuta estadounidense, dice que tras algunas investigaciones «caseras» descubrió que hay más de maneras diferentes de fregar platos, que dependen de quién los friegue y de lo que use. Si nos empeñamos en creer que no hay más que «una manera» o «un solo punto de vista», estamos cerrando una puerta que deja fuera la mayor parte de la vida.

Bloqueo Físico: El dolor de cuello se manifiesta cuando la persona mueve la cabeza en cierta dirección.

Bloqueo Emocional: Como el cuello es una de las partes flexibles del cuerpo, todo problema en él denota inflexibilidad en la persona que lo padece. Esta persona no quiere hacer frente a una situación porque no la puede controlar como quisiera. Tiene miedo de ver o de escuchar lo que pasa a su espalda, del mismo modo en que la rigidez en su cuello le impide girar la cabeza hacia atrás. Hace como que la situación no le molesta, pero en realidad siente muchas emociones.

Bloqueo Mental: La presencia de este padecimiento te indica que la razón por la cual no quieres hacer frente a la situación no es buena para ti. Esta actitud mental te lleva a ponerte rígido y no te ayuda a encontrar una solución. Si tienes miedo de lo que pueda pasar a tus espaldas, date cuenta de que este temor es producto de tu imaginación y no de la realidad. Te sugiero que hables con la persona o personas involucradas y las expreses al mismo tiempo lo que crees y lo que temes. Para más datos, observa si la rigidez de tu cuello te impide mover la cabeza para decir sí o no. Si te es difícil moverla para decir sí, la razón por la cual te impides decírselo a alguien o a una situación dada no es válida. Descubre el temor que te impide decir sí. Te sugiero que después verifiques con la persona relacionada si tu temor está justificado realmente. En resumen, si el dolor te impide decir sí, tu cuerpo te dice que lo mejor para ti es decir sí. Te dice que tu terquedad, tu inflexibilidad, te perjudica mucho más de lo que te ayuda en la situación que vives. Si lo que se te dificulta es decir no, sigue el mismo procedimiento.

Bloqueo Espiritual: Para conocer el bloqueo espiritual que te impide responder a una necesidad importante de tu SER, utiliza las preguntas sugeridas.

Fuente Narrativa: Lisa Bourbeau