Según los escritos de Elena G. de White, la “marca de la bestia” se refiere a la observancia del domingo como día de descanso, en contraposición al sábado, el séptimo día de la semana que se considera el verdadero día de reposo establecido por Dios.

En su libro “Eventos de los Últimos Días”, White menciona que la marca de la bestia es una señal de lealtad a la autoridad humana que impone el domingo como día sagrado, en lugar de la autoridad divina que consagró el sábado1.

Además, White explica que la “imagen de la bestia” se forma cuando las iglesias protestantes buscan la ayuda del poder civil para imponer sus dogmas, lo cual es una forma de protestantismo apóstata2.

Ella enfatiza que la verdadera obediencia a Dios se manifiesta en la observancia del sábado, y que aquellos que eligen seguir los mandamientos divinos recibirán el sello de Dios, mientras que los que aceptan la autoridad del mundo recibirán la marca de la bestia.

El sábado será la gran piedra de toque de la lealtad, pues es el punto especialmente controvertido. Cuando esta piedra de toque les sea aplicada finalmente a los hombres, entonces se trazará la línea de demarcación entre los que sirven a Dios y los que no le sirven.

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La prueba consiste en la imposición de la observancia del domingo

La esencia de la prueba radica en la imposición del domingo como día sagrado. No se juzgará a nadie sin antes haber comprendido la importancia del cuarto mandamiento. Sin embargo, cuando se promulgue la ley que altere el sábado, y la advertencia del tercer ángel alerte sobre la veneración indebida, se distinguirá entre la verdad y el error. Aquellos que persistan en su error recibirán entonces la marca de la bestia.

La imposición legal de la observancia dominical, una vez que se haya esclarecido la importancia del verdadero día de reposo, significará que quien viole el mandato divino para seguir una orden de menor autoridad, como la de Roma, estará enalteciendo al papado por encima de Dios. Se rendirá tributo a Roma y a la autoridad que promueve su institución. Se venerará a la bestia y su imagen.

El rechazo a la institución divina, que es el símbolo de la autoridad de Dios, y la preferencia por lo que Roma ha elegido como emblema de su poder, equivaldrá a aceptar el símbolo de sumisión a Roma, la “marca de la bestia”. Solo cuando esta elección se presente claramente y se invite a elegir entre los mandamientos de Dios y los de los hombres, aquellos que sigan desobedeciendo recibirán la “marca de la bestia”.

La perspectiva del Vaticano sobre la “marca de la bestia” no está claramente definida en los documentos oficiales y, por lo tanto, no hay una postura oficial que se pueda citar directamente. Sin embargo, la interpretación general dentro de la Iglesia Católica no suele enfocarse en la observancia del domingo como la “marca de la bestia”, sino que tiende a interpretar el Apocalipsis en un sentido más simbólico y menos literal.

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El fin del tiempo de gracia

Dios no nos ha revelado el tiempo cuando terminará este mensaje o cuando el tiempo de gracia llegará a su fin. Aceptemos las cosas reveladas para nosotros y para nuestros hijos, pero no procuremos saber lo que ha sido mantenido secreto en los concilios del Todopoderoso […]. EUD 193.1

Me han llegado cartas preguntándome si tengo alguna luz especial en cuanto a la fecha de la terminación del tiempo de gracia, y contesto que solo tengo este mensaje que dar: que ahora es el tiempo de trabajar mientras dure el día, pues viene la noche cuando nadie puede obrar.—Mensajes Selectos 1:224 (1894). by Ellen G. White

Compilado por Fabian Sorrentino. Fuentes: https://m.egwwritings.org/es/book/180.1467
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