El carisma es mucho más que un don innato: es un conjunto de actitudes, hábitos y destrezas que podemos comprender, desarrollar y aplicar de forma consciente. En este artículo exploraremos su esencia y alcance, combinando enfoques de psicología, comunicación y liderazgo para desentrañar qué lo hace tan poderoso en las relaciones humanas.
Veremos cómo nace la presencia magnética en el cerebro, qué patrones discursivos la alimentan y de qué manera quienes la encarnan inspiran confianza y motivación. Además, ofreceremos claves prácticas para cultivar ese imán personal y convertirlo en una herramienta de influencia ética y auténtica.
«El carisma es la manifestación visible de la conexión divina”. Fabián Sorrentino
Las Cualidades del Carisma
█ Condición Impecable: No se limita a lucir pulido; abarca el estado físico, la alimentación saludable, el aseo personal, la prolijidad del entorno y el descanso adecuado. Es la disciplina de atender cada detalle, desde la apariencia hasta la actitud, como reflejo del respeto por uno mismo y por los demás. Esa impecabilidad integral genera confianza incluso antes de que se pronuncie una sola palabra. Ver +
█ Compromiso a las relaciones: Es la elección consciente de cultivar vínculos con profundidad. Implica estar disponible, sostener la palabra dada y priorizar el crecimiento mutuo. El carismático comprometido no seduce momentáneamente: construye puentes duraderos. Ver este artículo, para comprender la conexión científica. Ver +
█ Colaboración y cuidado del otro: el arte de sumar sin diluirse. Es la capacidad de integrar talentos, escuchar y co-crear sin protagonismos. El carismático colaborador no brilla solo: hace que todos brillen. Valora las ideas de cada miembro, reconoce aportes y reparte responsabilidades para reforzar la confianza. Al celebrar logros compartidos, fomenta un ambiente de respeto y crecimiento mutuo. Ver +
█ Convicción e Involucramiento: Energía que mueve. Tener una visión clara y mostrar entusiasmo por ella despierta adhesión natural. Más que certeza, es pasión encarnada. Es la fuerza que nace de creer profundamente en lo que se dice y se hace. La convicción no impone, inspira. Es el fuego que enciende voluntades y moviliza decisiones. Ver +
█ Coherencia Congruente: Cuando lo que se cree, se siente, se piensa, se dice y se hace está alineado. Esa coherencia proyecta autenticidad, y genera una resonancia que trasciende las palabras. La persona congruente no necesita convencer: su sola presencia transmite verdad. Es el punto de encuentro entre la ética interna y la expresión externa, donde el ser y el actuar se funden en integridad. Ver +
█ Comunicación y Confianza: Más que hablar bien, se trata de conectar emocionalmente. El carismático convierte ideas en experiencias compartidas que trascienden la información. El carisma nace en la confianza interior: cuando crees en la asertividad de tu mensaje, esa convicción contagia credibilidad. Ver +
█ Calidad de Servicio: Es la excelencia puesta al servicio del otro. No se limita a cumplir expectativas, sino a superarlas con sensibilidad, precisión y calidez. El carismático que ofrece calidad de servicio convierte cada interacción en una experiencia memorable, porque entiende que servir es una forma elevada de liderazgo. Ver +
█ Conexión con la Fuente: Capacidad de generar proximidad, de hacer que el otro se sienta visto, escuchado y valorado. Pero va más allá del vínculo humano: es la sintonía con el origen, con aquello que da sentido, propósito y dirección. Quien está conectado con la Fuente irradia presencia, sabiduría y compasión. Esa conexión inspira, eleva y transforma, porque toca lo esencial en el otro. Ver +
Los Enemigos del Carisma
🦥 Sedentarismo: La inercia que apaga tu energía. Físicamente estancado y mentalmente adormecido, impide el dinamismo y la presencia viva que el carisma exige.
😒 Desinterés: La indiferencia que apaga el entusiasmo. Sin curiosidad ni empatía, anula la conexión genuina y te sella en una burbuja de apatía.
🏆 Competitividad: El afán de sobresalir a cualquier costo. Cuando el rival es el otro en lugar de la mejora compartida, erosiona la confianza y convierte la influencia en conflicto.
🤔 Indecisión crónica: La duda perpetua que paraliza la acción. Incapaz de elegir o comprometerse, drena tu fuerza de convicción y deja al carismático sin rumbo claro.
🎭 Hipocresía: El desajuste entre el interior y la máscara exterior. Proyectar una verdad simulada destruye la congruencia y siembra sospechas en quienes te observan.
😟 Inseguridad: El miedo constante que empaña la confianza. Dudar de tu propio valor proyecta dudas ajenas y debilita el imán natural que atrae a las personas.
🐑 Mediocridad y Conformismo: La mediocridad exige el mínimo esfuerzo y el conformismo acepta la corriente sin cuestionar. Esa resignación ante lo establecido apaga la iniciativa, borra tu huella y entierra tu potencial único. Al ceder sin alzar la voz, renuncias a tu autenticidad y te conviertes en un eco sin magnetismo.
😓 Culpa y Aislamiento: La carga que desvía tu foco. Atrapado en el pasado, tu presencia queda empañada y cada interacción se siente como un examen de expiación. El retiro voluntario que merma la influencia. Al cerrarte al entorno, apagas la chispa de la conexión y dejas de ser el puente que une realidades.
Carisma versus Manipulación
¿Alguna vez has deseado contar con recursos que te asistan a diagnosticar con claridad si tus interacciones o las de un otro fluyen desde la autenticidad o desde la persuasión indebida, y al mismo tiempo te ofrezca alternativas de acción?
Aprender a distinguir las categorías presentadas en estas tablas colaborará para no caer en la trampa. Para lo cual te invito a revisar estas dos tablas, desde su concepción hasta los distintos enfoques:
En la 1ra tabla distinguimos el carisma en sus versiones: genuina y oscura, frente a la manipulación, mientras en la 2da te ofrecemos las distintas cualidades necesarias a desarrollar (ordenadas acorde al Modelo MET en sus instancias superadoras) señalándote su contrapartida manipuladora para finalmente ofrecerte algunas rutas de salida creativistas.
Implicaciones Ontológicas de la Primer Tabla:
El carisma ético expande la conciencia al facilitar la co-creación de sentido auténtico; el carisma oscuro y la manipulación la contraen, sometiéndola a arquitecturas de control.
- La conciencia se revela como campo relacional en el carisma genuino, no mera propiedad individual.
- El carisma oscuro evidencia una conciencia simulada, construida sobre signos vacíos que bloquean la crítica.
- La manipulación expone la conciencia como receptor pasivo, desprovisto de agencia ante narrativas preconscientes.
- En la lógica, ser auténtico implica coherencia discursiva-accional; mientras el carisma falso y la manipulación dependen de falacias intencionales.
- A nivel neuropsicológico, la conciencia genuina se nutre de resonancia empática; las otras distorsionan los circuitos de recompensa y autocontrol.
- Epistemológicamente, el carisma real sostiene un saber intersubjetivo transparente; el oscuro y la manipulación generan “verdades” sesgadas o falsas.
- Desde la semiótica, la realidad se construye con símbolos auténticos o, en los otros casos, con signos descontextualizados o vacíos.
- La dinámica cuántica muestra cómo la atención compartida colapsa en entendimiento genuino, mientras que el engaño fija percepciones manipuladas.
- En bioética teofilosófica, el carisma verdadero respeta la dignidad; los otros violan principios eternos al instrumentalizar al otro.
- Fenomenológicamente, el carisma abre la experiencia vivida; el oscuro fractura la vivencia y la manipulación anestesia la percepción.
- Ontológicamente, estos tres modos revelan la conciencia como: expansiva y co-creada, alienada y dependiente, o capturada y despojada.
- La tabla sugiere que la línea entre influencia y coacción es un umbral ontológico: cambia la naturaleza misma del ser-consciente.
Estas distinciones resumen modos de existencia ontológicos: desde la conciencia expansiva del auténtico carisma hasta la conciencia alienada de la manipulación, donde el sujeto renuncia a su estatuto de aprehensor de la realidad en favor de un receptor pasivo.
Ahora revisemos esta segunda tabla:
Esta comparativa actúa como un mapa de navegación para identificar, en cada dimensión clave, las actitudes y comportamientos que te acercan al liderazgo carismático o al riesgo de manipular. Vuélvelo a mirar y presta mucha atención al camino de salida ético y empoderador, que es el que te llevará a una nueva dimensión.
¿Por qué los seres humanos permitimos que nos manipulen, o nos tomen el Control?
Explora en esta tabla para identificar patrones mentales, emociones manipulables y descubrir estrategias prácticas para reforzar tu autonomía, protegiendo tu bienestar emocional. Desde el inicio existe una razón disparadora de todas ellas (basada en un enfoque neurocientífico), pero te dejo a ti para que reflexionando, la descubras…
El Carisma: Un Viaje de Convergencia
Imagina que el Carisma es un núcleo radiante en el centro de una ciudad futurista —una energía viva que atrae, inspira y transforma a quienes se acercan. Este fenómeno no es fortuito: nace de múltiples dimensiones interconectadas.
🧬🛡️ Dimensión de la Salud y la Resiliencia: la biología del carisma sostenido
El carisma auténtico no puede sostenerse en un cuerpo enfermo, ni en una psique quebrada. Esta dimensión nos recuerda que el bienestar físico, emocional y espiritual son la base sobre la que se construye una presencia verdaderamente inspiradora.
En esta dimensión, el carisma interviene en:
- El Nivel de energía vital: el carismático irradia vitalidad, su cuerpo comunica salud.
- La Regulación del estrés: maneja la presión externa sin desbordarse, gracias a herramientas de autocuidado.
- La Resiliencia emocional: ante la crítica, la traición o el fracaso, se adapta, aprende, y vuelve más fuerte.
- El Autoconocimiento corporal: conoce sus ciclos de descanso, alimentación, y movimiento.
- Las Rutinas de cuidado interior: incorpora prácticas que lo nutren física y emocionalmente (meditación, ejercicio, alimentación consciente).
- La Plasticidad cerebral: entrena sus redes neuronales para la flexibilidad, el aprendizaje y el gozo.
Siendo el resultado de un equilibrio sistémico entre cuerpo, mente y espíritu, y por tanto, no puede ser sostenido sin hábitos regenerativos.
El líder carismático ,encarna en esta capa la salud, como un ejemplo: no desde la perfección, sino desde el cuidado consciente de su vitalidad, desde donde irradia estabilidad y confianza. Para potenciarte en esta capa te recomiendo nuestro artículo: Vitalescence.
📊 Dimensión Lógico–Matemática: la estructura invisible del carisma
Aunque el carisma suele asociarse con lo emocional, lo espiritual o lo intuitivo, también existe una dimensión lógica que lo sostiene: la organización racional del discurso, la coherencia interna, y la capacidad de estructurar pensamiento complejo con claridad y precisión.
¿Qué implica el Carisma desde la Lógica?
- Coherencia persuasiva: estructuras argumentales que fluyen sin contradicción.
- Validez retórica: razonamientos que cautivan sin manipular.
- Claridad intencional: proposiciones transparentes y directas.
- Economía conceptual: énfasis en lo esencial, evitando redundancias.
- Teleología comunicativa: fin implícito que orienta toda interacción.
En esta dimensión, el carisma se manifiesta en:
- Claridad argumentativa: el carismático sabe estructurar ideas, establecer relaciones causa–efecto, y anticipar objeciones.
- Uso de patrones cognitivos: maneja estructuras lógicas como analogías, silogismos y metáforas anidadas que facilitan la comprensión.
- Gestión de sistemas complejos: navega entornos de alta incertidumbre con pensamiento estratégico, integrando múltiples variables en tiempo real.
- Manejo del tiempo, ritmo y timing: su discurso tiene cadencia, equilibrio entre lógica y emoción, y un tempo persuasivo eficaz.
Esta dimensión también se vincula a la capacidad de mapear redes de relaciones, detectar constantes en el comportamiento social y proyectar escenarios posibles. Así, el carisma se vuelve predictivo y estructurado, sin perder su frescura.
En el fondo, el carismático conecta orden y creatividad, mostrando que su impacto no es solo emocional: responde a una lógica profunda que el grupo percibe como confiable y estable.
🧠 La dimensión NeuroPsicológica: la arquitectura sensorial del carisma que construye el vínculo
Desde los sensores del cuerpo, las señales sensoriales y los neurotransmisores (como la dopamina y la oxitocina) se generan las primeras chispas de atracción. Estos estímulos impactan en la amígdala regulando emociones como el miedo o la seguridad, mientras las neuronas espejo sincronizan nuestros movimientos, gestos y emociones con los del otro.
El ajuste del ritmo fisiológico (como la respiración o el tono de voz) y la memoria afectiva almacenada influyen en cómo reaccionamos ante determinadas personas. Todo esto predispone al carisma desde el cuerpo, antes incluso de la palabra.
A partir de ahí, emergen factores como la predisposición genética o los heurísticos de persuasión, que guían inconscientemente nuestras decisiones. En un contexto social, el modelado (observar y aprender de otros), las expectativas del grupo y el refuerzo motivacional refuerzan o inhiben rasgos carismáticos.
Aquí el carisma se nutre del intercambio de roles, la construcción de identidad compartida, y la alineación entre propósito y acción. Estos elementos se ven en líderes que encarnan valores colectivos, transmitiendo confianza ontológica y abriendo campos de posibilidad.
¿Qué implica el Carisma desde la Neuropsicología?
- Resonancia empática: activación simultánea de redes espejo.
- Regulación afectiva: tono emocional calibrado para acoger.
- Plasticidad social: flexibilidad neuronal ante feedback relacional.
- Enfoque atencional compartido: atención conjunta como vínculo.
- Neuromodulación del carisma: liberación de oxitocina en encuentros.
🔍 La Dimensión Epistemológica: el saber que da forma al carisma
El carisma no es solo una experiencia emocional o espiritual; también es un fenómeno que se construye desde el conocimiento, la interpretación del mundo y la forma en que el sujeto conoce y se conoce.
Esta dimensión plantea preguntas como:
- ¿Qué sé de mí mismo como sujeto carismático?
- ¿Cómo accedo al saber del otro para resonar con él?
- ¿Qué tipo de verdad transmite un líder carismático?
Desde esta perspectiva, el carisma se convierte en una forma de epistemología vivida: una manera de generar, compartir y legitimar conocimientos a través de la experiencia encarnada. El líder carismático no impone verdades, sino que despierta sentidos, ofrece claridad de significados y provoca descripciones fenomenológicas que amplifican la comprensión mutua.
Esta dimensión se sostiene en la interacción entre saber tácito y saber explícito, entre la sabiduría ancestral (tradición filosófica) y la intuición del presente. Así, el carisma opera como un puente entre lo conocido y lo aún por revelar, donde el sujeto se vuelve guía epistémico del grupo.
¿Qué implica el Carisma desde la Epistemología?
- Confianza epistémica: credibilidad construida en evidencias mutuas.
- Autenticidad cognitiva: sinceridad en certezas y dudas.
- Diálogo socrático: preguntas que invitan a repensar creencias.
- Justificación experiencial: fundamento en vivencias verificables.
- Transparencia metodológica: revelación de propios procesos de conocimiento.
🔤 Dimensión Semiótica: el carisma como lenguaje vivo
Todo carisma se comunica, pero más allá de lo que dice, significa.
La dimensión semiótica nos lleva al terreno de los símbolos, significantes, gestos, rituales y metáforas que configuran la percepción carismática. Aquí, el carisma actúa como un campo semántico cargado: cada palabra, movimiento o silencio del líder es leído e interpretado por los otros.
Elementos clave de la Semiótica:
- Uso de símbolos sagrados (cruz, fuego, agua, etc.).
- Narrativas internas que se proyectan hacia el afuera.
- Ritos y mitos que sostienen la identidad del grupo.
- Heurísticos de persuasión que operan como atajos interpretativos.
En este nivel, el carisma es un fenómeno semiótico complejo que funciona como texto y contexto a la vez. El sujeto carismático no solo habla: encarna significados. Sus actos son leídos como señales. Su coherencia valor–acción le otorga credibilidad simbólica.
La sintonía intersubjetiva también es semiótica: se establece cuando los significados son compartidos desde lo no dicho, desde los códigos que resuenan en un nivel profundo.
¿Qué implica el Carisma desde la Semiótica?
- Es un signo arquetípico: símbolo que resuena en lo colectivo.
- Una metáfora catalizadora: con imágenes que abren nuevas interpretaciones.
- Es iconicidad corporal: posturas e gestos que significan sin palabras.
- Es indexicalidad relacional: pistas contextuales que conectan.
- Es sintaxis narrativa: orden narrativo que cautiva la atención.
⚛️ Dimensión Cuántica: el misterio del carisma en movimiento
En la dimensión misteriosa el carisma se vuelve evento de posibilidad, probabilidad colapsada, entrelazamiento interpersonal y efecto observador.
Esta dimensión nos enseña que:
- Que el carisma no es fijo, sino ondulatorio: se activa en la mirada del otro.
- Que hay una superposición de roles: el líder y el guiado se transforman mutuamente.
- Que la presencia modifica el campo: al observar al carismático, cambiamos, y él también.
- Que existe una indeterminación social: el carisma aparece en contextos impredecibles y desaparece si se instrumentaliza.
Desde esta perspectiva, el carisma no es una sustancia, sino una vibración relacional que emerge en la intersección de múltiples campos de sentido, en una danza entre lo probable y lo real.
¿Qué implica el Carisma desde la Dinámica Cuántica?
- Entrelazamiento interpersonal: correlaciones instantáneas en vínculos.
- Colapso de posibilidades: elección de un mensaje que fija atención.
- Incertidumbre presente: apertura creativa ante lo impredecible.
- Campo de potencialidad relacional: horizonte de futuros compartidos.
- No-localidad conversacional: influencia más allá del contexto inmediato.
🕊️ La dimensión Bioética Teofilosófica: el carisma como responsabilidad vital
Toda irradiación carismática tiene un efecto, y con ello, una responsabilidad. La dimensión bioética nos interpela sobre el uso del carisma, sus efectos sobre el otro y los límites éticos del liderazgo. ¿Es el carisma un don para servir o una herramienta para dominar?
Aquí entran en juego:
- La intencionalidad: ¿busca el líder el bien común o su propia exaltación?
- La presencia plena: ¿está disponible de forma empática o manipuladora?
- El contagio emocional: ¿es usado para manipular masas o para sanarlas?
- La inspiración espiritual: ¿proviene de una fuente genuina o se finge para el control?
El carisma auténtico está alineado con los principios de la ética del cuidado, la autenticidad, la integridad existencial y la dignidad del otro. A esta altura, la bioética del carisma nos recuerda que irradiar no significa dominar, sino hacer florecer a quienes nos rodean.
Por otro lado la Teofilosofía observa al carisma como el don trascendente que toca lo inefable: el Imago Dei interior, la mística relacional, los símbolos sagrados, el mito y el rito, y el liderazgo como pastor–rebaño. No se trata de persuasión: sino de proyección de sentido, trascendencia existencial, y experiencia religiosa. El carisma toca la dimensión espiritual cuando se convierte en comunión con algo mayor que uno mismo.
¿Qué implica el Carisma desde la Bioética Teofilosófíca ?
- Dignidad inalienable: respeto absoluto por el otro.
- Compasión activa: caridad que impulsa cambios reales.
- Vocación trascendente: sentido último que motiva.
- Solidaridad universal: corresponsabilidad con toda comunidad.
- Responsabilidad moral: ética de las consecuencias sobre el prójimo.
Aquí hay un articulo que expande este concepto desde esta perspectiva.
🧘♂️ La dimensión Fenomenológica: habitar la presencia
El carisma se intensifica cuando el sujeto desarrolla una presencia plena. Esto implica una percepción atenta, una intencionalidad clara, y la capacidad de entrar en sintonía intersubjetiva: conectar con la vivencia interna del otro.
A través de la reducción fenomenológica (suspender juicios) y el intercambio de horizontes, el carisma se convierte en experiencia viva, no en técnica aprendida. Aparece entonces la coherencia entre valores y acciones como una vibración auténtica.
¿Qué implica el Carisma desde la Fenomenología?
- Intencionalidad de la presencia: atención plena al otro.
- Intersubjetividad vivida: experiencia compartida como terreno común.
- Eco corporal: resonancia somática de la interacción.
- Temporalidad existencial: sincronía de ritmos vitales.
- Sensación eidética: percepción clara de la “esencia” del encuentro.
Cuento corto: “La Sombra de la Transparencia” ✨
En las planicies aluviales donde un gran río dibuja meandros y canales efímeros, se cuenta que cada siglo surge una Transparencia: alguien cuya presencia, como el velo de agua que humedece el papel, hace aflorar matices ocultos en los pliegues del alma. No era oradora ni pretendía liderar; bastaban el suave roce del pincel y el fluir del agua para convocar un silencio donde la forma más mínima se volvía epifanía.
No obstante, muchos anhelaron encarnar esa sutileza. Cubiertos con ropajes brillantes y barnices fragantes, emergió una cohorte de imitadores. Querían encantar, no conmover; aprisionar, no liberar. Cambiaron la etérea armonía de las acuarelas por óleos densos, aplicando capas que estrangulaban la ligereza. Así, la Transparencia quedó corrompida: no por ella misma, sino por quienes pretendían falsificar su fulgor tras máscaras opacas.
Un día la Transparencia se desvaneció. Unos afirmaron que se había disuelto en el rumor de las corrientes; otros creyeron que naufragó en una costa lejana. En su ausencia surgió una paradoja: los imitadores se multiplicaron, mas sus palabras carecían de anclaje. Impecables en la superficie, permanecían mudas en el fondo.
Entonces renació como una mujer sensible. No adornaba su voz con floridos artificios; a veces vacilaba, otras soltaba verdades incómodas. Su gesto evocaba el fluir del agua que une orillas sin forzar el cauce. La veían como “un sensible personaje”… y su sola presencia era causal de disfrute, porque con ella: se sentían vivos.
Al fin se reveló el secreto: la auténtica transparencia no deslumbra ni oculta, sino que deja emerger. No tiñe para imponer, sino que permite el paso de la propia luz. Es, a un mismo tiempo, presencia y renuncia; ligereza y hondura; voz… y susurro nacido del silencio. ✨
🔮 Epílogo interdisciplinario:
Este cuento es punto de partida para cuestionar las representaciones sociales del liderazgo y analizar el carisma como fenómeno cuántico-fenomenológico: ¿Qué implica «ser» cuando no se busca «parecer»? ¿Cómo se entrelaza el carisma con una ética del cuidado y una semiótica de la honestidad encarnada?
«El carisma es la herramienta que permite a los líderes sanar y ser un ejemplo de transformación para los demás.» Fabián Sorrentino.
El Carisma como competencia superadora, en el Modelo MET®
█ ¿A que estamos comprometidos?
- Mantener coherencia entre palabra, pensamiento y acción.
- Cultivar la transparencia en cada intención.
- Promover relaciones genuinas.
- Preservar la inclusión de todas las voces.
- Sostener la responsabilidad social como eje.
█ ¿Qué Relaciones estamos estableciendo?
- Con los Integrantes de mi equipo como vínculo de crecimiento.
- Alianzas horizontales basadas en confianza recíproca.
- Redes de apoyo intergeneracionales y transgeneracionales.
- Colaboraciones interculturales con respeto dialógico.
- Comunidad de práctica para la retroalimentación continua.
█ ¿Qué Procesos de acción resultan pertinentes?
- Formular preguntas que revelan potencialidades.
- Facilitar espacios de escucha profunda.
- Compartir historias que inspiran cambios.
- Modelar comportamientos desde la vulnerabilidad.
- Celebrar logros colectivos con rituales breves.
█ ¿Qué Aprendizajes y Reflexiones implica?
- Autoobservación sistemática de hábitos relacionales.
- Lectura crítica de contextos organizacionales.
- Gestión emocional fundamentada en evidencia.
- Dominio de narrativas que movilizan la voluntad.
- Reflexión ética sobre el impacto de la influencia.
█ ¿Qué Competencias de Liderazgo requerimos?
- Visión inspiradora con fundamento pragmático.
- Influencia ética desde valores compartidos.
- Resiliencia adaptativa ante incertidumbres.
- Delegación empoderante y creativa.
- Resolución de conflictos como puerta de innovación.
█ ¿Qué Valores, Virtudes y Propósitos requiere el Carisma?
- Integridad radical.
- Coraje constructivo.
- Humildad generativa.
- Empatía transformadora desde la fuente hacia los otros.
- Servicio con sentido trascedente.
█ ¿Qué Legado deja el Carisma Espiritual en las personas?
- Autonomía creciente en otros.
- Conciencia colectiva ampliada.
- Inspiración para nuevas narrativas.
- Cohesión sostenible en equipos. (personas que te seguirán siempre que puedas seguir alimentando su vida)
- Creatividad expansiva que perdura.
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Un desarrollo del Dr. Fabián Sorrentino, acorde a las siguientes referencias:
- “Marco teórico para el estudio del Carisma”, Fundación Sonría, 21 Jul 2025. https://sonria.com/marco-teorico-para-el-estudio-del-carisma/
- Luis Álvarez Munárriz, “ONTOLOGÍA DE LA CONCIENCIA”, Universidad de Murcia, 2016. https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/9163621.pdf
- German Sánchez Griese, “La Ideología del Carisma”, Catholic.net. https://es.catholic.net/op/articulos/52657/cat/164/la-ideologia-del-carisma.html
- A Luthe, “El abuso de conciencia. Hacia una definición que permita su comprensión”, SciELO Chile, 1971. https://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-92732021000300173
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