Los principios metafísicos representan la parte de la filosofía que trata del ser en cuanto tal, y de sus propiedades, principios y causas primeras. La metafísica se basa en las ciencias universales por causalidad y es considerada una ciencia filosófica fundamental, ya que busca el conocimiento de la totalidad de las cosas, de todo lo que existe o puede existir.
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La metafísica, es una disciplina más amplia que abarca no solo la ontología, sino también otras áreas de investigación filosófica. La metafísica se centra en cuestiones más generales y abstractas sobre la naturaleza última de la realidad, incluyendo temas como el espacio, el tiempo, la causalidad, y la posibilidad de la existencia de entidades no físicas.
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La tradición aristotélica-tomista entiende la metafísica como la ciencia que estudia los principios de la realidad, y parte de que se puede entender cuál sea el fundamento real de lo existente, y que este fundamento, llamado ente, no es un rasgo general de la realidad, sino lo que hace a la realidad misma ser real. Peter van Inwagen, en cambio, la entiende como el intento de acceder a la verdad última sobre el Mundo mediante la respuesta a preguntas fundamentales. En este planteamiento, la tarea del filósofo es elegir entre respuestas alternativas.
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En resumen, la ontología y la metafísica son dos ramas fundamentales de la filosofía que, aunque están estrechamente relacionadas, se enfocan en aspectos diferentes de la realidad.
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Relación entre Ontología y Metafísica
A – Subcampo de la Metafísica:
La ontología es considerada a menudo como una parte de la metafísica. Mientras que la metafísica aborda preguntas amplias sobre la realidad, la ontología se enfoca específicamente en el estudio del ser y de las entidades.
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B – Complementariedad:
Ambas disciplinas se complementan. La ontología proporciona una base para la metafísica al definir qué tipos de cosas existen, mientras que la metafísica utiliza esta información para explorar preguntas más amplias sobre la naturaleza de la realidad.
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C – Interdependencia:
La metafísica depende de la ontología para establecer los fundamentos de lo que existe, y la ontología se apoya en la metafísica para contextualizar sus hallazgos dentro de una comprensión más amplia de la realidad.
En resumen, la ontología y la metafísica están intrínsecamente conectadas, con la ontología proporcionando los bloques de construcción esenciales que la metafísica utiliza para construir una comprensión más completa y profunda de la realidad.
Revisa esta lista con algunos de los principios metafísicos más conocidos y fundamentales:
De Mentalismo:
Este principio sostiene que “el todo es mente; el universo es mental”. Implica que la mente o la conciencia son fundamentales y subyacen a toda la realidad.
De Vibración:
Según este principio, “nada está inmóvil; todo se mueve, todo vibra”. Todo en el universo está en constante movimiento y cambio, desde partículas subatómicas hasta galaxias.
De Ritmo:
El ritmo es inherente a todo. “Todo fluye y refluye; todo tiene sus períodos de avance y retroceso”. Observamos ciclos y patrones en la naturaleza y en nuestras vidas.
De Generación:
Este principio afirma que “la generación existe por doquier; todo tiene sus principios masculino y femenino”. Representa la dualidad creativa presente en todas las cosas.
De Causa y Efecto:
Según este principio, “toda causa tiene su efecto; todo efecto tiene su causa”. Es la base de nuestra comprensión de cómo las acciones y eventos están interconectados.
De Correspondencia:
“Como es arriba, es abajo; como es abajo, es arriba”. Este principio sugiere que hay correspondencias y analogías entre diferentes niveles de existencia.
De Polaridad:
“Todo es doble; todo tiene su par opuesto”. La dualidad está presente en todo, desde la luz y la oscuridad hasta el bien y el mal.
De Entropía:
La entropía es una medida del desorden o la falta de organización en un sistema. Según este principio, la entropía tiende a aumentar con el tiempo en sistemas cerrados. Esto se relaciona con la idea de que todo tiende hacia la disolución y la dispersión. Y no solo se aplica a sistemas físicos, sino también a aspectos más amplios de la existencia, como la evolución de la conciencia y la sociedad. Algunos filósofos y científicos han explorado cómo la entropía afecta la creatividad, la información y la complejidad en el universo..
Además de estos principios, la metafísica también aborda otros conceptos fundamentales:
Realidad y Existencia:
La metafísica se ocupa de comprender qué es real y qué existe. Examina la naturaleza de la realidad en sí misma y cómo percibimos y experimentamos el mundo.
Ser y No Ser:
Este concepto se refiere a la dualidad entre la existencia y la no existencia. ¿Qué significa realmente “ser” o “no ser”? ¿Cómo definimos nuestra propia existencia?
Espacio y Tiempo:
La metafísica también explora la naturaleza del espacio y el tiempo. ¿Son entidades independientes o están intrínsecamente relacionadas con la realidad?
Sustancia y Accidente:
Aquí se distingue entre lo esencial (la sustancia) y lo contingente (los accidentes). Por ejemplo, ¿qué hace que algo sea lo que es? ¿Sus propiedades o su esencia subyacente?
Unidad y Pluralidad:
Este concepto aborda la relación entre lo uno y lo múltiple. ¿Cómo se relacionan las partes individuales con el todo? ¿Hay una unidad subyacente que conecta todo?
Potencia y Acto:
Basado en la filosofía aristotélica, este concepto explora el cambio y la realización de potencialidades. ¿Cómo se manifiestan las posibilidades en la realidad actual?
Esencia y Existencia:
Aquí se distingue entre lo que una cosa es (su esencia) y el hecho de que exista (su existencia). Por ejemplo, ¿qué hace que un objeto sea lo que es más allá de su mera existencia?
Una compilación y posterior desarrollo del Dr. Fabián Sorrentino para la Tesis de la ODC (Ontología de la Conciencia).
