El Principio Biocéntrico es el fundamento filosófico central de la Biodanza, formulado por Rolando Toro en 1970.

Este principio sostiene que la vida es el centro y el valor supremo de todas las cosas, y que el universo está organizado en función de la vida.

Aquí te detallo algunos aspectos clave:

  1. La Vida como Centro: Según el Principio Biocéntrico, la vida no es solo una característica del universo, sino su razón de ser. Esto significa que todas las acciones y decisiones humanas deben orientarse hacia la promoción y el respeto de la vida en todas sus formas1.
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  2. Reformulación de Valores: Este principio propone una reformulación de los valores culturales, colocando la vida en el centro de todas las disciplinas y comportamientos humanos. Esto incluye áreas como la educación, la psicoterapia, la economía y la jurisprudencia2.
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  3. Sacralidad de la Vida: El Principio Biocéntrico restablece la noción de la sacralidad de la vida, promoviendo una conexión profunda y respetuosa con todas las formas de vida, desde los organismos más simples hasta los ecosistemas complejos2.
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  4. Integración con el Cosmos: Este principio también sugiere que la vida está intrínsecamente conectada con el cosmos. La idea es que el ser humano debe sintonizarse con la información de la vida, desde el nivel celular hasta el nivel cósmico, promoviendo una integración armoniosa con el universo2.
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  5. Potencialización de la Vida: La Biodanza, basada en el Principio Biocéntrico, busca potenciar la vida y la expresión de sus poderes evolutivos. Esto se logra a través de experiencias vivenciales que promueven la salud, el bienestar y la evolución personal1.

En resumen, el Principio Biocéntrico es una invitación a vivir de manera consciente y respetuosa, valorando y promoviendo la vida en todas sus manifestaciones. Este enfoque no solo tiene implicaciones filosóficas, sino también prácticas, ya que influye en cómo nos relacionamos con nosotros mismos, con los demás y con el entorno.