La Web 4.0 ya ha empezado para algunos y esta versión se basa en explotar toda la información que ahora mismo contiene, pero de una forma más natural y efectiva. Lo que propone la Web 4.0 es mejorar la experiencia de usabilidad mediante el uso de nuevas tecnologías que permitirían un nivel de interacción más completo y personalizado.

La idea de la Web 4.0 es ofrecer soluciones a partir de toda la información que damos y existe en la Web. Para lograrlo, se fundamentará en cuatro pilares.

  1. La comprensión del lenguaje natural y tecnologías Speech to text (de voz a texto y viceversa).
  2. Nuevos sistemas de comunicación máquina a máquina (M2M).
  3. Uso de la información de contexto. Por ejemplo, ubicación que aporta el GPS, ritmo cardiaco que tu smartwatch registra, etc.
  4. Nuevo modelo de interacción con el usuario.

En la película  Minority Report, la Web 4.0 sería algo similar a los “Precognitivos”, esos seres capaces de ver el futuro. Lo que hace la Web 4.0 es adelantarse a situaciones cotidianas, como ver que llegas tarde al trabajo y enviar un mensaje avisando.

¿Y cómo será la web 4.0?

Aún no se ha establecido un estándar para el Internet 4.0, ni mucho menos una denominación, pero sí que existen pistas acerca de por dónde evolucionará.

Es posible que podamos llamar a la Internet 4.0 la web activa”.

En la actual web 3.0, el uso de buscadores sigue siendo imprescindible, y estos nos sirven información –mayormente en forma de páginas web- que utilizamos en función de nuestras necesidades.

Así, si por ejemplo buscamos alojamiento en un hotel para pasar una noche en Roma, escribimos en un buscador algo así como “habitación hotel Roma”, y el buscador nos sirve un listado de páginas web, generalmente buscadores de habitaciones, que utilizaremos de forma “manual”.

La web 4.0 supondrá un cambio radical.

Cuando esté completamente desarrollada, suprimirá varios de los pasos que nos exige la utilización de la web 3.0, haciendo más directo e “invisible” su uso.

En primer lugar, es posible que los tradicionales buscadores no desaparezcan pero sí se integren en asistentes virtuales.

Estos asistentes virtuales serán capaces de entender el lenguaje natural, tanto hablado como escrito, y podremos lanzarles solicitudes como lo haríamos con un ayudante humano. Así, le diremos algo como “resérvame una habitación en Roma para el día 12 de julio”, y directamente obtendremos una reserva en un hotel elegido en base a nuestros gustos –que el asistente virtual conocerá previamente- y sólo tendremos que confirmar.

Este «Internet ambiental» supone la etapa final de aquel viejo servicio que interconectaba ordenadores y personas. Ya no escribiremos «taxis en Madrid». Con decir «venid a recogerme» el servicio entenderá que estás buscando un servicio público, utilizará tu posicionamiento GPS y te ayudará. El resto es cosa suya. Porque no estamos hablando de un servicio pasivo, sino uno inteligente, uno que analiza la pregunta y estructura la respuesta en torno a los distintos condicionantes ambientales.

Pero esta “simplificación” o “activación” del uso que hagamos de la red no será el único cambio que nos proporcione la web 4.0. Además, será la propia red la que nos proponga acciones –esto ya lo vemos hoy en día en su estado primitivo a través de las sugerencias que llegan a nuestros teléfonos móviles-, de una forma contextual.

Así, si por ejemplo una aplicación o tu asistente virtual conoce tus costumbres y tus gustos, reservará, por su cuenta y en tu nombre, entradas de cine para ver el nuevo estreno de tu director favorito, necesitando únicamente que le confirmes tu aceptación de la reserva.

La web 4.0 es información transformada en contexto para salvar vidas: mientras estás corriendo un ratito por la mañana, tu smartwatch detecta una subida agresiva de ritmo cardíaco y alerta al centro médico más próximo. Un altavoz inteligente como Alexa escucha ruidos extraños en una habitación de tu hogar y comienza a grabar un posible hurto. Vehículos inteligentes que detectan un accidente previo a acontecer

¿Tardaremos mucho tiempo en vernos inmersos en la web 4.0?

Probablemente menos del que esperas. Las tecnologías que la harán posible ya se encuentran en desarrollo y empiezan a ver la luz.

Asistentes virtuales, como Siri, Cortana o Google Now, obtienen, día a día, un mayor entendimiento del lenguaje natural gracias a sistemas de aprendizaje automático.

A su vez, el “Big Data” se procesa cada vez de forma más efectiva, poniendo en relación toda la información que se obtiene a través de múltiples fuentes.

¿No te resultan apasionantes todos estos cambios?

Compilado por el Dr Fabián Sorrentino exclusivamente con fines académicos. Se recomienda investigar en fuentes originales: Vilapress, Xataka y Pandora.