Margaret Fuller fue una destacada escritora, editora, crítica literaria, feminista y defensora de los derechos humanos en el siglo XIX. Como una de las principales figuras del movimiento trascendentalista en Estados Unidos, Fuller desempeñó un papel pionero en la lucha por los derechos de las mujeres y la reforma social. Fue la primera mujer en trabajar como editora del influyente periódico The Dial y más tarde como corresponsal extranjera del New York Tribune. Su obra más conocida, «Woman in the Nineteenth Century» (1845), es considerada un texto fundacional del feminismo estadounidense.

(23 de mayo de 1810 – 19 de julio de 1850)


Infancia y educación

Sarah Margaret Fuller nació el 23 de mayo de 1810 en Cambridgeport, Massachusetts. Fue la mayor de los ocho hijos de Timothy Fuller, un abogado y congresista, y Margaret Crane Fuller. Desde niña, Margaret mostró una inteligencia excepcional. Su padre, deseoso de darle una educación rigurosa, la educó en casa con un plan de estudios que incluía griego, latín, literatura y filosofía. Este enfoque académico era poco común para las niñas de la época, pero la disciplina estricta impuesta por su padre también la afectó emocionalmente, causando problemas de salud y un carácter introvertido en su juventud.

A los 14 años, Margaret fue enviada a la Port School en Boston y luego a una escuela para mujeres en Groton, Massachusetts. Sin embargo, nunca asistió a una universidad formal, ya que las instituciones de educación superior aún estaban cerradas para las mujeres. A pesar de estas limitaciones, continuó su aprendizaje autodidacta, especialmente en idiomas, filosofía y literatura.


Carrera intelectual y conexión con el trascendentalismo

En la década de 1830, Fuller comenzó a destacarse en los círculos literarios e intelectuales de Boston. Se ganó una reputación como una erudita de gran talento y se relacionó con figuras clave del movimiento trascendentalista, como Ralph Waldo Emerson, Henry David Thoreau, y Bronson Alcott. El trascendentalismo promovía ideas como la importancia del individuo, la conexión espiritual con la naturaleza y la búsqueda de la verdad más allá de los dogmas religiosos.

En 1839, Fuller se convirtió en la primera editora de The Dial, la revista oficial del trascendentalismo, una posición que mantuvo hasta 1842. Durante este tiempo, escribió ensayos sobre literatura, filosofía y cuestiones sociales, explorando temas como la igualdad de género y el potencial espiritual de los seres humanos.


«Woman in the Nineteenth Century»

En 1845, Fuller publicó su obra más influyente, «Woman in the Nineteenth Century», una ampliación de su ensayo anterior, «The Great Lawsuit: Man versus Men, Woman versus Women». Este libro fue un manifiesto revolucionario que argumentaba por la igualdad de las mujeres en la educación, el trabajo y los derechos civiles. Fuller planteó que las mujeres no debían ser vistas como subordinadas a los hombres, sino como iguales en intelecto y espíritu. La obra tuvo un gran impacto en el movimiento feminista emergente en Estados Unidos.


Trabajo en el New York Tribune y viajes a Europa

En 1844, Margaret Fuller comenzó a trabajar como crítica literaria para el New York Tribune, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar una posición tan prominente en un periódico importante de Estados Unidos. Su aguda crítica y su enfoque en temas sociales le ganaron un público fiel.

En 1846, fue enviada a Europa como corresponsal extranjera. Durante sus viajes, visitó Inglaterra, Escocia, Francia e Italia, donde entrevistó a figuras intelectuales y políticas como George Sand y Giuseppe Mazzini. Fuller se interesó profundamente en los movimientos revolucionarios que estaban transformando Europa en ese momento.


Vida en Italia y compromiso político

En Italia, Fuller se involucró en el movimiento de unificación y revolución conocido como el Risorgimento. Conoció y se enamoró de Giovanni Angelo Ossoli, un aristócrata italiano que compartía sus ideales políticos. Aunque no estaban casados formalmente, tuvieron un hijo, Angelo Ossoli, en 1848. Durante este tiempo, Margaret trabajó como enfermera y escritora en Roma, apoyando la causa republicana encabezada por Mazzini.

Cuando las fuerzas republicanas fueron derrotadas en 1849, Margaret y su familia se vieron obligados a huir de Italia.


Muerte trágica

En 1850, Margaret Fuller, Giovanni Ossoli y su hijo abordaron un barco rumbo a Estados Unidos con la intención de comenzar una nueva vida. Sin embargo, el 19 de julio de 1850, su barco naufragó frente a la costa de Fire Island, Nueva York. Aunque algunos sobrevivieron, Margaret, Giovanni y su hijo murieron en el accidente. Sus pertenencias, incluidos los manuscritos que planeaba publicar, se perdieron en el mar.


Legado

A pesar de su vida truncada, Margaret Fuller dejó un impacto profundo en la literatura, el feminismo y la filosofía estadounidense. Fue una de las primeras voces en abogar por la igualdad de género, destacando la necesidad de oportunidades educativas y profesionales para las mujeres. Su influencia puede rastrearse en generaciones posteriores de feministas, escritoras y reformadoras sociales.

Margaret Fuller es recordada como una pionera en muchos sentidos: una intelectual destacada en un mundo dominado por hombres, una defensora apasionada de los derechos humanos y una escritora que desafió las normas de su tiempo. Su obra sigue siendo una inspiración para quienes buscan la igualdad, la justicia y el desarrollo del potencial humano.