Inspirados en Karl Gustav Jung, Mircea Elíade y en posteriores investigaciones de la eco-filósofa Joanna Macy, el Dr. Fabián Sorrentino ha realizado una clasificación de los paradigmas en el Modelo MƐT® (Modelo de Educación Transformativa), que nos invita a transitar en el nivel 3, al ser humano viviendo desde el control.

Modelo Mental a TransitarLa Vida desde el control

(Reconocer el paradigma de control y de perfección para lograr limpiarlo)

Los seres humanos aborrecen (e intentan evitar) ser despersonalizados, ser tratados como una cosa, ser controlados por otros, ser manipulados, no ser apreciados, recibir órdenes, ser dominados, no ser respetados, ser forzados, ser empujados, ser explotados, ser determinados por otros, no ser tomados en cuenta o en serio, ser engañados, sentirse incapaces, sentirse descartables. Lo que ansían es ser tratados como personas, poseer autodeterminación, tener control sobre su destino, poder planificar y llevar a cabo sus planes, triunfar, asumir responsabilidad, tomar sus propias decisiones con autonomía e iniciativa, y que le reconozcan sus capacidades. Abraham Maslow

Para ilustrarlo, por si todavía quieres jugar al inocente, va el comentario de un manager a su equipo: “Cualquier cosa que piensen que haya que hacer, háganla. Pero por supuesto, no gasten mu­cho dinero, ni tomen medidas extremas sin que yo las supervise y les de mi conformidad.”

Nuestra comprensión tradicional como seres humanos o personas supone que tenemos determinadas propiedades fijas. Todos “somos” de una o de otra manera y de acuerdo a cómo “somos” es como actuamos en la vida.

Entendemos que el paradigma de la vida como control, es observable en el dominio del hacer, actuamos como actuamos dado las características sociales del medio donde nacimos, crecimos, estudiamos, trabajamos y accionamos. Vamos desarrollando determinados paradigmas, creencias, condicionamientos que generan maneras de ser.

Te propongo un camino de autodescubrimiento para observarte nuevamente, casi con un microscopio, que te puedas pescar, verte con nuevos ojos. Como dice el libro de los Cuatro Acuerdos sacando la bruma delante de tus ojos.

La Vida en Automático.

Cuando llegamos a un espacio que puede ser una orga­nización, una comunidad, un grupo de cualquier actividad, una relación sea de amistad o de pareja, ya hay una serie de prácticas y límites establecidos (por el grupo de personas o la persona), ya hay formas de comportarse que per­tenecen a ese espacio y que están dadas: esto es lo que se llama la cultura de ese espacio. Esto es la inercia. La cultura, la inercia, es la mente colectiva que restringe la posibilidad, de que cualquier cosa que no esté siendo sea.

La inercia de la humanidad ya existía antes de que noso­tros naciéramos y seguirá existiendo después de nuestra muer­te. Nacimos en una cultura específica, con normas específi­cas. La inercia viene del pasado. La inercia cultural es mí  tendencia a ser como la mayoría, a censurar a los que no actúan según las tendencias comunes. La inercia personal es la tendencia a no respetar nuestra palabra, a no ser rigurosos con nosotros mismos. La historia, la cultura preexistente constituye la inercia en la que nacimos, y la función de la  inercia es que permanezca en movimiento lo que está en movimiento y quede en reposo lo que está en reposo. La inercia es un mecanismo para causar la persistencia del pasa­do. Si queremos generar una nueva cultura, una nueva forma de ser, algo que no exista, la función de la inercia es impedirlo; ella quiere que las cosas sigan siendo como son. La iner­cia es una estructura autorreferencial constituida por la cul­tura con el propósito de rechazar la posibilidad marginando cualquier cosa nueva, o haciendo que cualquier cosa nueva quede en más de lo que ya está siendo.

Todos estamos, estructuralmente, siendo parte de la conversación inercial que nos está llevando adónde vamos; si somos responsables por quienes somos en este momento, podemos empezar a despertarnos a esta conversación y estar más alertas y empezar a crear espacios para «ser», abriendo una posibilidad en la inercia que lo previene.

Esta propuesta de descubrir la gran caja en la que te encuentras y esta concepción de lo que significa ser humano y el despertar a nosotros mismos nos permite reformular lo que es posible y abrirnos a un futuro insospechado desde los paradigmas actuales.

La manera de ser, la forma en que la mayoría de las personas están siendo en sus vidas es una entre todas las posibles. La pregunta es ¿Quién esta eligiendo esa forma de ser? Es posible que sea la inercia la que esta eligiendo.

A continuación un par de preguntas para que nos compartas tu respuesta.

1 – ¿Comparte al menos 5 dominios en que te encuentras en la inercia y cuál es la dependencia que identificas?

En el nivel 1 del MET vemos que cuando te paras por un compromiso y declaras una nueva posibilidad, y haces que ese compromiso sea ahora la realidad que emerge, la inercia, la realidad de la conversación previa, va a querer impedirlo haciendo con la nueva posibilidad lo mismo que hizo siempre.

La única brecha que se puede abrir en la inercia es mediante el compromiso de pararse por algo que no existe en la inercia, por algo que eliges, y ser sólo lo que se requiera ser para que esa posibilidad exista como realidad.

Hasta aquí vimos uno de los condicionamien-tos del paradigma de control, te invito a que trabajemos sobre los modelos mentales y sobre la caja para que con estos parámetros tengas una idea más profunda y consciente que quien has estado siendo.

Modelos Mentales

“Los modelos mentales son las imágenes, supuestos e historias que llevamos en la mente acerca de nosotros, los demás, las instituciones y todos los aspectos del mundo. Como un cristal que distorsiona sutilmente nuestra visión, los modelos mentales determinan lo que vemos. (…) Pero como los modelos mentales suelen ser tácitos, y existen por debajo del nivel de la conciencia, rara vez son sometidos a verificación y examen.” Peter Senge.

Los modelos mentales son conjuntos de ideas y creencias, profundamente arraigadas en todo ser humano, que organizan su forma de com-prender al mundo y a sí mismo. Los modelos mentales permiten que uno dé sentido a sus circunstancias y opere sobre las mismas. Ellos condicionan las inferencias e interpretaciones que hacemos sobre la realidad, aportando los programas de acción automáticos con los que funcionamos en el día a día. Los modelos mentales son los mapas que usamos para navegar con efectividad en el mundo.

Los modelos mentales son tan omnipresentes y esenciales como el aire. Y tal como el aire, suelen ser invisibles. Uno puede pasar toda su vida creyendo en la certeza absoluta de sus percepciones y conclusiones, sin darse cuenta de que todo aquello que experimenta y piensa es filtrado y condicionado por su modelo mental. Como gafas coloreadas, los modelos mentales tiñen la vida entera de quien las usa. Y como ocurre con las lentes de color, están tan cerca de los ojos que uno no puede verlas; más bien uno ve a través de ellas. Todo individuo extrae y adapta su propio modelo mental de un menú existente en la cultura.

2 – ¿Qué ves en esta escena? ¿Cuál es tu modelo, puedes aportar otras miradas?

3 – ¿Qué modelos mentales identificas?

La caja de creencias. Una conversación limitante.

Desde el inicio de nuestra vida, vamos desarrollando un sistema cerrado, autorreferencial de creencias, opiniones y prejuicios que nos permite interpretar, decodificar el mundo exterior, lo que llamamos la realidad. Nos permite encontrarle sentido al caos de información que nos rodea. Cuando llegamos a la edad en la que comenzamos a tener conciencia de la existencia de este sistema, éste ya está bastante estructurado y su mecanismo de crecimiento está inexpugnablemente consolidado.

El sistema de creencias es una estructura autorreferencial diseñada para lograr su propia convalidación, la del propio sistema. Una de las mayores fuerzas restrictoras del crecimiento humano es la adicción paradigmática a tener razón con respecto a las creencias que constituyen el paradigma. Sin embargo, el sistema está en constante evolución. Modificamos, descartamos y acuñamos nuevas creencias y opiniones en una variedad de supuestos.

Mientras estamos vivos vamos haciendo modificaciones y ajustes al sistema: por ejemplo, cuando una nueva experiencia cuestiona alguna creencia del sistema o cuando aceptamos por ciertos acontecimien-tos con los que nuestras creencias resultan incompatibles, o cuando por algún comentario hecho por alguien con la suficiente autoridad o por una lectura, se inicia un proceso de reflexión que lleva a interpretar ciertas creencias como incongruentes o finalmente, cuando queremos algo que el sistema actual no puede satisfacer o proveer.

La verdad es una conversación interna, es algo que nos decimos a nosotros mismos. Es un juicio. Por esto este sistema auto-referencial.

Validamos como verdadera una creencia cuando satisface el estándar de asimilación personal al sistema.

La cultura dentro de la que nacimos y crecimos produce mía conversación de fondo en la cual tenemos una escucha, una interpretación y mía historia para todo. Esta conversación constituye los paradigmas o modelos mentales, que están ensamblados sobre una serie de presunciones, verdades cotidianas, sentido común y sabiduría convencional que abarcan todo en la vida. Esto es lo que llamamos la caja de creencias.

Como muestra este comercial, vivimos la vida dentro de una Caja o más de una, que nos aíslan, nos separan de las infinitas posibilidades de vida que existen. Nacemos en una Caja y nos pasamos toda la vida reforzando las paredes. Mantenemos la Caja intacta usando nuestras creencias sobre quiénes o qué somos y sobre lo que el mundo es. Sólo nos permitimos tener pensamientos que concuerden con nuestro sistema de creencias. Tenemos solamente aquellos sentimientos que la Caja que hemos creado nos autoriza.

Toda nuestra experiencia de vida y todos los resultados que obtenemos están determinados por esa Caja en que vivimos o, para expresarlo de otro modo, por ese contexto que creamos para nuestra vida. Los seres humanos vivimos encerrados en esta Caja. Los seres humanos nos tenemos a nosotros mismos en una Caja de la cual no podemos salir por nosotros mismos.

Hasta la próxima. Dr Fabián Sorrentino. Creador del Modelo MƐT®
Este artículo es parte de la curricula de la Carrera de Coaching & Mentoringde Ser.Red. Y una extensión bibliográfica del Manual del Mentor.