La taxonomía de Marzano es un sistema de clasificación de objetivos educativos elaborado por Marzano y Kendall con base en la taxonomía de Bloom, una de las más conocidas en el ámbito. Esta clasificación de los objetivos se creó sobre todo para incorporar nuevos conocimientos sobre cómo los humanos procesamos la información.

Estos descubrimientos se fueron haciendo a lo largo de las décadas que siguieron a la publicación de la taxonomía de Bloom original. Los autores de la taxonomía de Kendall pensaban que, a pesar de que Bloom quería crear una teoría práctica que ayudase a crear objetivos educativos, no tuvo éxito en este cometido.

Por el contrario, creó un sistema teórico que no tuvo un gran impacto sobre el currículo escolar. Por ello, estos autores intentaron crear una taxonomía más práctica que ayudase a mejorar el sistema educativo. Creando un sistema de clasificación más aplicable, los profesores podrían ajustar mejor sus enseñanzas a sus alumnos.

¿En qué consiste la taxonomía de Marzano?

La taxonomía de Marzano está formada principalmente por dos dimensiones que interactúan entre sí: los dominios de conocimiento y los niveles de procesamiento.

Dominios de conocimiento

Los dominios de conocimiento son tres: información, procedimientos mentales y procedimientos psicomotores. Se trata del tipo de aprendizajes que un alumno puede llevar a cabo.

La taxonomía de Marzano considera que los conocimientos que podemos aprender son principalmente de tres tipos:

1 – Información

Se trata de la adquisición de datos puros, como fechas, eventos históricos o teorías. Es lo que solemos entender comúnmente como “conocimiento”. Se trata de un aprendizaje puramente mental.

2 – Procedimientos mentales

Son formas de pensar que requieren seguir unos pasos para alcanzar un objetivo. Por ejemplo, la aplicación de fórmulas matemáticas o de un sistema de pensamiento lógico serían tipos de procedimientos mentales. También lo serían aprender a leer o a hablar un nuevo idioma.

3 – Procedimientos psicomotores

Son todos los conocimientos relacionados con el uso del cuerpo y las habilidades físicas. Dentro de esta clasificación podemos encontrar todas las habilidades deportivas y otras habilidades como escribir o tocar un instrumento.

Niveles de procesamiento

Aunque se suelen dividir en tres (cognitivo, metacognitivo, e interno o self), en la práctica se suelen dividir en seis subniveles. Se trata del nivel de profundidad con la que el alumno puede adquirir un conocimiento nuevo.

La clasificación de los niveles de procesamiento es la siguiente:

1 – El nivel cognitivo

La información es todavía consciente. Aquí podemos encontrar cuatro subniveles, que son los siguientes: recuperación, comprensión, análisis y uso del conocimiento.

2 – El nivel metacognitivo

Se aplican los nuevos conocimientos para regular los propios procesos mentales. Gracias a los aprendizajes metacognitivos, se pueden establecer metas y autorregularse para alcanzarlas.

3 – Nivel interno o self

Se produce cuando un nuevo conocimiento afecta al sistema de creencias del individuo que lo adquiere.

Ambas clasificaciones interaccionan entre sí, por lo que dentro de cada uno de los tres tipos de aprendizaje podemos encontrar una descripción de los seis niveles de procesamiento.

¿Para qué sirve?

Aumento de conocimiento gradual

La taxonomía creada por Marzano y Kendall está más orientada a la práctica, de tal manera que se centra en el diseño de tareas específicas para aumentar el nivel de conocimiento del aprendiz de forma gradual. Esta mejora en el diseño se logra, sobre todo, teniendo en cuenta procesos que no estaban presentes en la taxonomía de Bloom.

Algunos de estos procesos que Marzano y Kendall incluyeron en su taxonomía son las emociones, las creencias de la persona, su autoconocimiento y la capacidad de crear objetivos. Todos estos procesos forman parte de lo que se conoce en el mundo de la investigación como metacognición.

Más enfocada en adultos

Debido a que la metacognición se va desarrollando con los años, la taxonomía de Marzano y Kendall está más orientada al trabajo con adultos y para la adquisición de competencias profesionales. Sin embargo, también puede ser utilizada en el trabajo con niños.

La parte más importante del trabajo de estos autores es su fundamentación teórica; es decir, la inclusión de todo el conocimiento científico creado en las últimas décadas sobre el funcionamiento del aprendizaje humano.

Ventajas y Utilidades

Gracias a la adición de estos conocimientos, la taxonomía de Marzano presenta algunas ventajas frente a la de Bloom:

– Mayor número de sugerencias para trabajar con los objetivos de aprendizaje, en función de si se trata de información pura, procedimientos mentales o procedimientos psicomotores.

– Mejor conocimiento sobre ciertos procesos fundamentales en el aprendizaje, como la emoción, la memoria, la motivación y la metacognición.

– Mayor precisión a la hora de crear objetivos de aprendizaje, teniendo un mapa más específico de los tipos de conocimiento que se pueden adquirir y la forma en la que se van adquiriendo.

– Debido a esta mayor precisión al crear objetivos, también se puede evaluar más fácilmente si estos se han conseguido alcanzar.

Quizás la diferencia más llamativa entre la taxonomía de Bloom y la de Marzano es el tipo de aprendizaje que ambos autores consideran que se pueden realizar.

– Por un lado, Bloom planteó que los conocimientos pueden ser de tres tipos: cognitivos (lo que hemos llamado información en la taxonomía de Marzano), psicomotores (el equivalente a procedimientos psicomotores), y afectivos (relacionados con las emociones y las formas de sentir).

– Por el contrario, Marzano y Kendall consideran que las emociones no son un sistema de conocimiento aparte, sino que se tratan de algo que media la adquisición de todos los demás tipos de conocimiento.

Diferencias con la taxonomía de Bloom 1956 y 2001

Fundamentación teórica

Además de esta diferencia fundamental en la clasificación del conocimiento, la taxonomía de Marzano está mucho más basada en la investigación que la de Bloom.

Debido a las críticas que sufrió el anterior sistema de clasificación por parte de muchos teóricos, Marzano y Kendall se propusieron mejorar la taxonomía ya existente con los nuevos conocimientos generados por la investigación cognitiva.

Como resultado, la fundamentación teórica de la taxonomía de Marzano es mucho más fuerte que la de su predecesora.

Sobre Marzano y Kendall

Robert J. Marzano

Investigador educativo estadounidense. Ha publicado más de 200 artículos sobre educación, cognición, liderazgo educativo o desarrollo de programas prácticos para maestros y formadores. A su vez, es autor o coautor de más de 50 libros.

Ha realizado investigaciones y teorías educativas sobre los temas de evaluación basada en estándares, cognición, estrategias de enseñanza de alto rendimiento y liderazgo escolar, incluido el desarrollo de programas prácticos y herramientas para maestros y administradores en escuelas K-12.

John S. Kendall

Licenciado en Psicología, ejerció como profesor en el Gustavus Adolphus College durante más de 30 años.

Referencias

  1. Taxonomía de Robert Marzano: verbos recomendados para indicadores y niveles cognitivos” en: Orientación Andújar. Recuperado en: 6 Marzo 2018 de Orientación Andújar: orientacionandujar.es.
  2. Gallardo Córdoba, 2009. “La Nueva Taxonomía de Marzano y Kendall: una alternativa para enriquecer el trabajo educativo desde su planeación”. Manual Nueva Taxonomía Marzano y Kendall. Recuperado de cca.org.mx
  3. Taxonomía de Marzano” en: Alex Duve. Recuperado en: 6 Marzo 2018 de Alex Duve: alexduve.com.
  4. “Comprendiendo la Taxonomía” en: Taxonomía de Marzano. Recuperado en: 6 Marzo 2018 de Taxonomía de Marzano: taxonomiamarzano.weebly.com.
  5. “Comparación de las Taxonomías: Bloom, Marzano y Webb” en: Terapia Educativa. Recuperado en: 6 Marzo 2018 de Terapia Educativa: terapiaeducativa.wordpress.com.

Lifeder. (24 de agosto de 2022). Taxonomía de Marzano: en qué consiste y para qué sirve. Recuperado de: https://www.lifeder.com/taxonomia-marzano/.