Enfermedad de la piel que afecta principalmente a las mujeres. Se caracteriza por manchas rojas que se escaman, localizadas principalmente en la región del rostro. Es una afección tenaz y recurrente. El lupus diseminado es más grave y puede afectar a cualquier órgano de manera periódica, con alternancias de actividad y remisión. A menudo se acompaña de fiebre, malestares, fatiga, anorexia y adelgazamiento.  En caso de lupus crónico, véase problemas de la piel.

Con respecto al lupus diseminado, indica que la persona que lo padece se está autodestruyendo. No tiene razón para vivir y preferiría morir, aunque no se decide. En Jo más profundo de sí misma quiere vivir y tener una buena razón para hacerlo. Con frecuencia se deja dominar y no se afirma lo suficiente.

Lupus (lobo en latín) ¿Es posible que te creas un lobo, es decir, una persona feroz para tus seres queridos y que te odies por ser así? Para tener una actitud tal de autodestrucción, debes haber tenido un inicio difícil en la vida, pero nunca es demasiado tarde para retractarte de tu decisión de que la vida no merece ser vivida. Toma tiempo para dilucidar lo que quieres realmente y decídete a lograrlo. Un paso a la vez puede llevarte lejos. Si te diriges hacia lo que quieres, aun cuando sea despacio, encontrarás la razón de ser que buscas.

Existen diversos tipos de lupus. Sin embargo, el lupus suele ser una enfermedad inflamatoria que puede tocar gran número de órganos. Se atribuye su origen al sistema auto – inmunitario. Desarrollo un lupus cuando vivo un gran desanimo, odio o tengo vergüenza de mí, lo cual hace que se debilite mi sistema de defensa.

Mi malestar muy frecuentemente tiene su origen en una culpabilidad emocional profunda que me roe interiormente. Prefiero castigarme en vez de afirmarme. Bajo los brazos, capítulo porque tengo la sensación de que no hay salida posible, ninguna solución y puedo vivir frustración frente a mi impotencia.

La muerte es una escapatoria y rehúso aceptar el amor y el perdón hacía mí- mismo o hacía los demás. Volver a aprender a amarme constituye una etapa importante, incluso esencial, a mi curación. Puedo pedir ayuda interiormente o pedir a personas competentes que me ayuden para empezar el proceso de curación interior