La inquietud o desasosiego (como signo fisiológico disfuncional) es, según una teoría postulada por Liebert y Morris en 1967, uno de los componentes principales de la ansiedad. El otro componente sería la emocionalidad. Esta última se refiere a los síntomas fisiológicos tales como sudar, sufrir palpitaciones o tener alta la presión arterial.

• El prefijo “in-”, que es equivalente a “sin”.
• El verbo “quiescere”, que puede traducirse como “reposar”.
• El sufijo “-tud”, que viene referirse a una cualidad.

El individuo inquieto lleva a cabo una conversación negativa con sigo mismo que le impide concentrarse en lo que hace. Ejemplo: Los estudiantes que ansiosos durante un examen, se dicen repetidamente que van a suspender o que la memoria les falla. Estos pensamientos interfieren con la acción verdaderamente importante en ese momento que es hacer el examen. Esto ocurre porque las áreas del cerebro encargadas de resolver las preguntas del examen se están utilizando en especular posibilidades sin importancia. La mente ansiosa se caracteriza así por la dificultad que tiene para focalizar sus recursos mentales eficientemente.

La inquietud puede referirse también a una sensación de preocupación. Por ejemplo, una madre puede decir que está inquieta porque su niño no ha llegado a casa a la hora que debiera. Puede ser también preocupación por conductas que llevan a cabo los demás: «Me preocupa que no coma verdura».

La inquietud se manifiesta por agitación, angustia, aprensión. Mi inquietud puede tener su fuente en mi infancia principalmente si viví inseguridad física o social, o si tuve la sensación de carecer de algo en el plano afectivo, de mi educación o si me sentí abandonado en cierto momento.

Esta inquietud puede reaparecer a la edad adulta cuando vivo una situación similar a la que viví en mi infancia y cuando “reactiva” este sentimiento. Debo aprender a confiar en la vida. Debo aprender también a hacerme confianza. Debo estar más fuerte que mis angustias para controlarlas en vez que sean ellas las que me controlen y alimenten mi sentimiento de impotencia frente a la vida.

En el Ámbito del Aprendizaje:
Inquietud, puede ser concebida como la inclinación del ánimo hacia algo: “Juan Manuel siempre tuvo inquietudes artísticas”, “Mi inquietud literaria me llevó a estudiar la obra de los principales poetas chilenos del siglo XX”, “Me molesta la gente que no tiene ninguna inquietud y que se conforma con cumplir con sus obligaciones diarias y nada más”.

La inquietud en una persona que vive en armonía puede concebirse como un punto de partida, un estado de necesidad, duda o carencia que lejos de alejar al sujeto de su foco, crea motivación. Convirtiéndose en un impulso hacia el bien o incentivo cuya consecución produce la reducción de la necesidad surgida y por lo tanto la restauración del equilibrio. Este es un recurso muy utilizado en la educación basada en retos.

Esta restauración es satisfactoria por lo que podemos relacionar esta teoría con la hedonista ampliándose las posibilidades de esta última.

inquietudEsquema de Hull: Este ciclo resulta válido para las necesidades de orden biológico, pero es difícil encajarlo completamente en la realidad evolutiva, progresiva y de desarrollo del comportamiento humano.

Teniendo en cuenta el componente cognoscitivo de la persona, esta tiene la posibilidad de prever lo que puede suceder en el futuro, lo que crea un desajuste entre lo que es en realidad y lo que se anticipa, dándose así el ciclo motivacional y por lo tanto su posibilidad de mejorarlo y perfeccionarlo. El tipo de motivos que le surgen a un individuo de una necesidad o desequilibrio es lo que se ha dado en llamar en la pedagogía actual motivaciones intrínsecas.

La teoría del incentivo, se ha tratado en la escuela tradicional, fundamentalmente a partir de la Ley del Efecto de Thorndike, como elemento de refuerzo para consolidar conductas en los individuos. Sin negar el refuerzo, si quiero dejar constancia, que en dicha escuela el refuerzo se ha confundido con las notas y los premios (refuerzo positivo), o con los castigos (refuerzo negativo). En la educación contemporánea, intentamos que el incentivo se desarrolle, o bien en la consecución del objetivo, sobre todo en alumnos adolescentes o adultos, o en la misma actividad que sea significativa, en los alumnos más pequeños.

Compilado por Fabián Sorrentino
Fuentes: Wikipedia.
Obedece a Tu Cuerpo, Amate – Escrito por Lise Bourbeau
La motivación en el aprendizaje © Enrique Martínez-Salanova Sánchez
Definición de inquietudhttp://definicion.de/inquietud/#ixzz4CmpGX1yb